19 y 17 años tienen imputados por incendio de la muni de Quilpué
Sebastián González Flores quedó en prisión preventiva pese a no tener antecedentes policiales mientras que M.L.M.M. quedó con arresto domiciliario total. Arriesgan altas penas que incluso podrían llegar a los 20 años de presidio.
No se descarta que sean más personas las involucradas pero al menos ayer, el Ministerio Público formalizó a dos jóvenes supuestamente involucrados como autores del voraz incendio que la tarde del martes consumió más del 80% del edificio consistorial de Quilpué, propiedad de fines del siglo XIX que para los residentes más antiguos de la Ciudad del Sol formaba parte de la identidad de sus habitantes.
Fue la fiscal jefe de la comuna, Mónica Arancibia quien expuso en audiencia los argumentos para formalizar por el delito de incendio - uno de los más graves que contempla el Código Penal - a los dos jóvenes: Sebastián Ignacio González Flores de 19 y la menor de 17 años M.L.M.M.
De acuerdo con lo narrado por la fiscal, ambos jóvenes habrían tenido participaciones específicas: él lanzando una botella con un líquido - aparentemente un acelerante - y ella instando a quienes se encontraban en el lugar a quemar el municipio.
Habrían sido los testimonios aportados por 4 funcionarios de la Sección de Investigación Policial, SIP de la Segunda Comisaría de Carabineros, los que permitieron establecer la dinámica de los hechos.
"Como es de conocimiento público efectivamente el día de ayer - martes - distintas personas participaron frente a la municipalidad en desórdenes y situaciones violentas y en ese contexto personal de la SIP de la Segunda Comisaría de esta ciudad que estaban de civil, se pudieron percatar de esta situación y en particular de la presencia de los dos imputados que fueron detenidos en el día de hoy (ayer)", explicó tras la audiencia.
La persecutora añadió que no se descarta que existan más personas involucradas en estos hechos y que la investigación continua su curso por los próximos 90 días.
"Pero ellos dos fueron observados. El imputado lanzando una botella que al parecer contenía un elemento acelerante porque al lanzarla, los funcionarios se percatan que esto provoca que el fuego, que ya se había iniciado, se encendiera aún más (...) La adolescente fue vista y escuchada por los funcionarios municipales incitando a quemar la municipalidad, con las expresiones que se reprodujeron en audiencia: 'quemen esta hueá'", detalló la persecutora.
Altas penas
La fiscal Mónica Arancibia explicó que el Código Penal establece 3 tipos de autoría y que en este caso el Ministerio Público consideró que para el caso del adulto, concurre el de una persona que directamente comete el delito y en el de la menor, "cuando una persona, concertada para la ejecución, presencia el ilícito". La tercera dice relación con el instigamiento.
"En cualquiera de las tres alternativas las penas para el autor de un delito son las mismas, independiente de cualquiera de las tres modalidades. Como se trata de una menor de edad, la legislación establece una sanción menor en un grado a la que tendría un adulto", precisó la persecutora.
En este caso, la pena que arriesga el adulto por un delito de incendio va de 5 años y un día hasta 20 años y para la menor de edad el rango de pena es de 3 años y un día a 5 años en la modalidad de internación en régimen cerrado o semicerrado.
Tras la audiencia de control de detención y formalización de cargos, el magistrado Milenko Grbic Miranda dictaminó la prisión preventiva para Sebastián González y la cautelar de arresto domiciliario total para la menor M.L.M.M. Asimismo fijó un plazo de investigación de 90 días.
Identidad
Para el alcalde de Quilpué, Mauricio Viñambres, pese a las coordinaciones tras el primer intento de quemar el municipio, carabineros ha estado sobrepasado.
El alcalde descartó que al momento del siniestro hubiese personas al interior, aunque sí pueden haber estado aquellos que se ocupan, en situaciones de emergencia, de cortar el suministro eléctrico.
"Está todo grabado y todo será entregado a los tribunales para quienes resulten responsables", precisó el jefe comunal, quien se hizo parte de la querella que interpuso el intendente.
Pese a que existen seguros comprometidos, el alcalde anticipó que éstos no permiten cubrir la totalidad de los daños.
Los planes a futuro para este edificio donde funcionaba la tesorería, inspección, secretaría municipal, Sernac, oficina de organizaciones sociales, oficina de partes y las oficinas de los concejales, era convertirlo en la biblioteca municipal y un centro cultural.
La gobernadora del Marga Marga, Carolina Corti aseveró que existía información de intentos por tratar de distraer la atención y quemar el sello y el emblema de la comuna de Quilpué.
"Esto data de 1925, yo soy quilpueína y esto representa un emblema para Quilpué (...) Si hoy queremos hacer una demanda legítima este no es el camino ", planteó la autoridad.
En las afueras del edificio consistorial, quilpueínos miraban con asombro las condiciones en que quedó el recinto.
"Esto nunca se había visto antes. He vivido aquí los 78 años que tengo. Me da lástima que haya personas que piensen así", declaró Nana sentada en los escaños a las afueras del recinto.
Igual de triste se manifestó Ema, quien dijo sentirse asustada y nostálgica del Quilpué que era tranquilo.
José Phillipi, presidente de la unión comunal de juntas de vecinos, opinó que se deben separar las legítimas demandas de lo que no es más que vandalismo. "Esto no es una protesta social, aquí hay un grupo de vándalos que afectan el patrimonio de la ciudad", criticó el dirigente.