Matías Valenzuela y - Priscilla Barrera
Los porteños se reunieron junto a la Estación Barón y partieron en dirección a Viña del Mar por la avenida España, dejando una pista liberada para el paso de los vehículos. Eran alrededor de 2.000 personas que marchaban pasivamente y en un entorno plenamente familiar, con algunas excepciones (ver recuadro).
A la altura de Yolanda, algunos de los jóvenes que lideraban el avance, comunicaron con megáfono que habían compañeros retrasados a los que no dejaban alcanzar a la marcha, de modo que cortaron todo el tránsito en la pista para esperarlos y seguir marchando hacia Viña.
Llegando a la Caleta Portales, se encontraron con los sindicatos de pescadores que durante esa misma mañana ya habían cortado la calle para manifestarse.
"Nosotros hace mucho tiempo que estamos pidiendo un Ministerio de Pesca, el cual nunca hemos tenido, y la pesca artesanal para ellos es una cosa irrisoria, el descontento de los pescadores a nivel nacional se une con lo que está pasando, en estos momentos nos hacemos partícipes del descontento de la calle, porque somos chilenos. Lo que no apoyamos son los saqueos, los disturbios y los robos, no va por ese lado, pero sí apoyamos el paro nacional", manifestó Jorge Castro, director del sindicato de Caleta Portales.
Viña al encuentro
A la hora de manifestarse viñamarinos y porteños son uno solo y lo han hecho sentir fuerte y claro. En la Ciudad Jardín el punto de encuentro fue la plaza Sucre donde a eso de las 11 de la mañana ya empezaron a juntarse jóvenes, adultos mayores y niños. El carácter de la marcha fue familiar, madres y padres con sus hijos, abuelos, funcionarios públicos, profesores, trabajadores de la salud. Nadie se restó a la manifestación autoconvocada como "Marcha por Chile".
Unas 4 mil personas marcharon por el par Viana-Alvares y se reunieron en el entorno del Reloj de Flores que ya desde temprano lucía sin los punteros y rodeado de efectivos militares. Pasadas las 12 la columna decidió avanzar hacia la Av. España encontrándose con sus pares porteños en las cercanías del Liceo Industrial. En un abrazo fraterno se unieron los manifestantes que enfilaron unidos hacia la Ciudad Jardín.
Santiago
Sin lugar a dudas que una de las imágenes más impactantes de la jornada se registró durante la tarde de ayer en Santiago, en donde más de un millón 200 mil de personas se congregaron en la Alameda y sus alrededores para dar vida a "La marcha más grande de Chile" de forma pacífica y hasta el cierre de esta edición, sin ningún tipo de disturbios.
La cifra oficial de la concurrida manifestación fue confirmada por la intendenta de Santiago, Karla Rubilar, quien destacó la manera pacífica en que se desarrollaron los hechos la tarde de ayer en la capital.
Los manifestantes se mostraron tranquilos y al son de las canciones de Víctor Jara, con "El derecho de vivir en paz" y de Los Prisioneros con "El Baile de los que sobran", se movieron en una jornada histórica.
Cabe destacar que desde el triunfo del No en 1988 no se registraba una marcha tan masiva, y es la primera de estas características que se da en democracia.