Sofía Navarro Martínez

Mañana, a contar de las 12.30 horas, Everton dirá presente en los pastos de Cavancha para enfrentar a Deportes Iquique, duelo en que la tarea de sumar puntos será obligación tanto para locales como ruleteros.

Por un lado, el plantel viñamarino llega de la mano de Javier Torrente, que inició con el pie derecho tras sumar de a tres frente a Universidad de Concepción, por lo que la idea es aumentar la racha y aportar en la cruzada de sumar los 34 puntos que se pusieron de meta de aquí hasta el final del campeonato. En la vereda contraria, los celestes vienen de caer por 4 a 0 frente a Unión Española, aunque más allá de los escenarios opuestos, ambos clubes buscarán alejarse del descenso.

En el camarín evertoniano, el partido se siente como una final, aunque el golpe bajo que recibieron los dirigidos de Jaime Vera, obliga más atención. Al respecto, el volante del oro y cielo, Benjamín Berríos, adelantó que contra los iquiqueños "es un partido importante, lo afrontamos como una final. Hay que ir a ganar, es difícil porque enfrentamos a un rival que viene herido, acaba de recibir cuatro goles, por lo tanto se vuelve el doble de peligroso. Iremos con los dientes apretados a ganar este partido".

Así mismo, el delantero ruletero, Walter González, apuntó que, más allá del oponente, "de hoy en adelante los partidos serán complicados, serán una final, pero tenemos que enfrentarlo con toda la paciencia del mundo y seguir por el camino que hicimos, el del triunfo".

Volvió EL GOL

En su último encuentro oficial, Everton ganó por la cuenta mínima al Campanil gracias a un tanto de González, quien volvió a anotar luego de nueve meses. "Ojalá pueda retomar mi ritmo, seguir jugando. Esperemos poder sumar todos los puntos necesarios hasta el fin del campeonato", recalcó el paraguayo.

Luego del encuentro en Cavancha, los auricielos se concentrarán en la vuelta de copa Chile donde enfrentarán a Colo Colo, en Sausalito, el próximo sábado a las 15.15 horas.

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