Matías Valenzuela
Un mensaje que nadie podía tapar, literalmente. Greenpeace Chile y los dirigentes de la Zona de Sacrificio se manifestaron con una proyección sobre el cordón industrial para poner "el grito en el cielo" por la contaminación que los afecta desde hace años.
Con un poderoso data show apuntando hacia el edificio de AES Gener, los dirigentes se manifestaron proyectando imágenes de 45 por 45 metros, en horas de la madrugada.
Fueron distintos mensajes que se desplegaron junto a las fumarolas que despiden las chimeneas de las plantas. El tenor de los mensajes apuntaba específicamente a la compañía aludida y una "complicidad" de parte del estado. Se proyectaron demandas específicas, con nombre y apellido. "AES, 'gener'ador de muerte", o "Presidente, el carbón mata", fueron algunos de los recados enviados desde una furgoneta apostada a varios metros de distancia.
"tragedia"
Matías Asun, director nacional de Greenpeace en Chile, declaró que "con esta acción hemos querido alertar sobre la tragedia medioambiental y de salud que por décadas vive esta zona y sus habitantes. No es justo y es inconstitucional que se esté envenenando a miles de chilenos de manera impune con estas chimeneas de carboneras que contaminan el entorno y calientan el planeta. Aquí hay un papel cómplice que ha tenido el estado, y por cierto empresas como AES Gener, responsables de estas centrales"
Agregó que "la situación es dramática, hay metales pesados en la tierra, plomo en la sangre de los vecinos, derrames de carbón, intoxicaciones masivas, pérdida de biodiversidad y destrucción de recursos marinos. La situación es tan grave que la Corte Suprema ya ha advertido que si vuelven a generar intoxicaciones masivas se deberá generar una evacuación general de la zona. De hecho, hace unas horas la zona ha enfrentado una nueva emergencia ambiental debido a la alta presencia de dióxido de azufre".
En el lugar también estuvieron representantes de la comunidad, quienes expusieron su situación.
"Durante muchos años y de manera sistemática se han vulnerado nuestro derecho constitucional de vivir en un medioambiente libre de contaminación. Lo que sufrimos acá de manera diaria es que estamos siendo envenenados. Suena duro, durísimo, pero es la triste realidad", señaló Katta Alonso, vocera de la organización Mujeres en Zonas de Sacrificio y Resistencia de Quintero-Puchuncaví.
La dirigenta agregó que "se va a cumplir un año desde las masivas intoxicaciones del año pasado y lo que resulta insólito es que todavía no hay ni responsables ni claridad respecto de lo que pasó y qué fue lo que llevó a cientos de nuestros hijos a los hospitales. Lo peor de todo es que esto sigue pasando a diario con índices de contaminación que sobrepasan todas las normas, con derrames de carbón y una calidad vida que no se merece ningún chileno".
La Estrella de Valparaíso contactó a AES Gener para recoger sus impresiones, pero declinaron referirse al tema.