Dueño de la Casa Vander: "Me aplauden por el amarillo"
Felipe Araya, dueño del hotel boutique del cerro Alegre, contó que tiene guardado el número del color.
Es imposible no verla desde distintos puntos de Valparaíso. La Casa Vander no solo destaca por su infraestructura, diseño y ubicación en pleno paseo Dimalow, corazón del cerro Alegre. Su color amarillo, hace inevitable fijar su mirada en ella, y descubrir que tras sus paredes se esconde una historia del siglo XIX, y que se matiza con un moderno restaurante, cómodas habitaciones de hotel boutique, un servicio de primer nivel y un bar que funciona en el nivel -1.
Felipe Araya es quien tomó la posta del lugar durante los últimos años, y asegura que ha debido trabajar de manera intensa para mantenerlo en primer nivel, y que -por ejemplo- para dar con el amarillo del exterior, debió recorrer cientos de lugares.
"El amarillo me gustó mucho más, lo busqué por cielo, mar y tierra porque se ve de todos lados. Es un color independiente, es bonito para una casona tipo alemana, victoriana. Todo el mundo me aplaude por el amarillo", cuenta, agregando que tiene guardado el número del color y la marca.
Felipe también cuenta que este tipo de renovaciones enfrentan hoy una lentitud que termina por afectar los proyectos. "Es bueno normar", dice, pero advierte que hay que esperar a veces dos años para que se autoricen las obras de remodelación.
El turismo
Casa Vander -al que se puede llegar por el ascensor Reina Victoria- está definida como un hotel - boutique y recibe turistas en búsqueda de descanso, una buena vista, habitaciones cómodas y una buena mesa. "Se nos exige mucho más que el promedio", indica Felipe, quien destaca que la carta está en constante renovación.
Pero no solo para los huéspedes, agrega que el restaurante ofrece menúes diarios. La idea, añade, es que "cada día quienes vengan prueben un plato distinto para que vayan conociendo nuestra cocina, que es tipo fusión, a veces tomamos lo mejor de cara país y hacemos un plato de buena calidad", asegura Felipe.
En tiempos de aplicaciones, Felipe asevera que el mejor precio siempre estará en el trato directo.