Carla Olivares Rojas
"¿Era verdad que murió el Cheo?", así reaccionó una vecina del block C-2 de la Villa La Roca de Quintero al conocer el deceso de su vecino Alberto San Martín Fuentes, de 49 años. Asegura que era buena persona y buen vecino, pero que los escándalos eran habituales en ese departamento ubicado en el cuarto piso.
Según el relato de vecinos, Alberto San Martín vivía junto a su familia, pero tenía constantes problemas con sus hijos productos de las drogas, de la pasta base específicamente y eso sería lo que terminó por llevarlo a la tumba.
"Era mala la convivencia familiar, era una familia con muchos problemas por temas de drogas, todos consumían, excepto la mamá que es una muy buena persona, pero los dos hijos y el marido estaban metidos. El último hijo se metió después y ahí hubo más problemas", relató otro de los vecinos.
Funcionario Municipal
El "Cheo" era un conocido funcionario municipal que trabajaba en los camiones del aseo; muchos lo recuerdan como alguien alegre y simpático, por eso es que lamentan su partida.
"Era súper conocido, buena onda, buena persona, aunque haya tenido problemas, no se metía con nadie y era trabajador. La persona que lo mató, su hijo, al principio solo fumaba marihuana, pero después se metió en el vicio (pasta base) y tenían problemas todos los días porque le robaba las cosas para tener para drogas, pero el fallecido siempre salía a buscarlo y decía '¿dónde esta mi regalón?', se salvaban el uno al otro", relató otra vecina.
El crimen
Fue a eso de las 20.00 horas cuando una de las nueras de Alberto San Martín llegó al departamento y encontró al dueño de casa sentado en la taza del baño con una estocada bajo la axila izquierda, pidió ayuda de inmediato, pero el funcionario municipal ya estaba fallecido.
"Se realizaron todas las pericias respectivas, no se encontró el arma y, a través de las diligencias de Labocar y de la SIP se estableció que habían testigos de los hechos en relación a que momentos antes había ocurrido una pelea entre el occiso y uno de los hijos, quien no se encontraba en el departamento", señaló el capitán Matías Fernández, subcomisario de Carabineros de Quintero.
Momentos más tarde, personal uniformado ubicó a Diego San Martín Donoso, de 28 años quien realizó su declaración en la comisaría, pero que no coincidía con lo que se encontró en el sitio del suceso.
"Él otorgó una versión que no coincide 100% con la realidad y con las pericias respectivas, a eso se suman las declaraciones de testigos de oídas y presenciales que lo sitúan en el sitio del suceso. Por una orden judicial otorgada por el magistrado de turno se produjo la detención en la comisaría y hoy (ayer) pasará a control de detención donde será formalizado por el delito de parricidio", sostuvo el capitán Fernández.