Nelson Figueroa:
Con 37 años de edad, ya está próximo a completar sus 1.000 carreras ganadas.
Ignacio Criguer Vega
El jockey que ha vuelto en gloria a la hípica central
La vida está llena de oportunidades que algunos aprovechan para enmendar rumbo y, posteriormente, tener como relato una experiencia significativa para transmitir.
A propósito de esto, un profesional de la fusta que ha sabido ganarle a la adversidad es Nelson Figueroa, quien de vuelta en la hípica central (Valparaíso Sporting, Club Hípico e Hipódromo Chile) se está llenando de logros deportivos.
El jockey de 37 años de edad, es casado con Jenniffer, hija del retirado jockey, Luis Menghini. Sus hijos son Krishna, Cristopher y Victoria, la menor. Su hermano Mauricio -uno de los grandes jinetes de la historia hípica- fue uno de los que motivó a Nelson para que llegase al "Deporte de Reyes".
-Nelson, ¿cómo fueron sus inicios como jockey?
-Tengo casi 20 años de jinete, con altos y bajos, y con alrededor de 950 triunfos. Todas las victorias las atesoro con mucho cariño.
-Cuéntanos de algún premio Grupo I que hayas ganado.
-Si bien todas las carreras ganadas han sido importantes para mí, un clásico que recuerdo con cariño fue con "Apunta Alto", que fue mi primer Grupo 1.
-El Derby en Viña lo ha corrido varias veces. ¿Qué tan especial es esta competencia?
-El Derby uffff, no tengo palabras para expresarlo bien; es una de las carreras más hermosas de la temporada estival a nivel nacional. He tenido la oportunidad de correrlo varias veces , pero sin mucha opción.
-Un tema que quizás ya varias veces le han preguntado, específicamente las razones por las que se alejó un tiempo de las pistas. Coméntenos de aquello, si puedes y quieres.
-Incomoda un poco volver a tocar el tema, pero te puedo decir que me he alejado en varias oportunidades de mi profesión, familia y seres más queridos producto del alcohol y las drogas, las cuales me consumieron mucho tiempo de mi juventud. Pero gracias a Dios, hoy en día puedo decir con la frente en alto que estoy mejor que nunca y los triunfos lo avalan.
Aire sureño
-El año pasado estuvo compitiendo exclusivamente en el Club Hípico de Concepción y peleando la estadística. ¿Qué tal ese tiempo en el sur del país?
-Sí, así es, fue una grata experiencia estar en Conce y estoy muy agradecido de la gente de por allá. Las victorias además me dieron un gran golpe anímico.
-¿Le gustaría mencionar y/o agradecer a alguna persona, partícipe de sus logros y rehabilitación?
-A Dios por esta hermosa oportunidad que me está brindando, a mi mujer Jeni, a mis hermanos y mi padre, sobrinos y a todas esas personas que sin duda se sentirán orgullosas de estos logros que estoy teniendo. Y como profesionales a los preparadores Rafael Quiroz y su hijo Rodrigo; a don Rafael Bernal, John Pinochet y a toda esa gente de la hípica de Medio Camino en Concepción, preparadores cuidadores y Jinetes. Muchas Gracias.
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