¿Qué pasa con los refuerzos de Everton?
Salvo las contadas excepciones de Gonzalo Freitas y en menor medida Cerato y Campestrini, el resto de los rostros nuevos que trajo el técnico Gustavo Díaz, no ha justificado su arribo y presencia en Viña del Mar.
Afines del año pasado y tras la partida de Javier Torrente -técnico que mal que mal, salvó del descenso a los Oro y Cielo- se dijo que las penurias que pasó Everton el 2018, no volverían a repetirse. Es más, por ahí se dijo que desde México querían convertir a Everton en el 4to grande de Chile y fue incluso el propio Jesús Martínez Patiño quien aventuró que por lo general en el tercer año de gestión, se ven los resultados deportivos en los clubes que administra el Grupo Pachuca.
No obstante -y pese a las buenas intenciones de muchos- lo cierto es que hasta el momento y jugadas 13 fechas de 30 en el fútbol chileno, el Everton de Gustavo Díaz no convence, ni menos camina en el fútbol chileno.
Es cierto y como generalmente ocurre, el técnico tiene una alta cuota o dosis de responsabilidad, pues, se supone, fue él quien observó, eligió y formó el actual plantel, siendo también el responsable de los rostros nuevos que arribaron a la Ciudad Jardín.
Y en este punto, nos queremos detener hoy, ya que al margen del buen o mal trabajo del "Chavo" Díaz, el nivel de los refuerzos que él eligió (en desmedro de otros), no ha sido el de los mejores. Y es que de los 8 rostros nuevos que llegaron para la temporada 2019, solo 2 ó 3 han respondido. Es cierto, los análisis suelen hacerse a final de año, pero con casi la mitad del torneo jugado... algo se puede concluir o adelantar.
Por ejemplo, de los refuerzos, el que más ha llenado el gusto de los hinchas -no siendo incluso el que más ha jugado- es el "Charrúa" Gonzalo Freitas, quien impone presencia y respeto en el mediocampo e incluso, cuando no está... se nota su ausencia en la cancha.
Quienes también han aportado lo suyo en el terreno de juego -aunque bien podrían dar un poquito más- son Maximiliano Cerato y el golero Cristián Campestrini, quienes, además, le otorgan experiencia al equipo.
Ahora, del resto... muy poquito por rescatar. Bastián San Juan, sin brillar mucho, al menos se defiende en la marca y como lateral (no le pidan desborde, eso sí), pero no es más que un "Paco" Venegas, por ejemplo. A Benjamín Berríos le tocó la mala suerte de lesionarse ante Antofagasta y jugar muy poco, aunque tampoco llegó como titular. Y entre los casos más cuestionables y/o criticables están los de Sergio Vergara (será más que Matías Leiva, que ha anotado 12 de los 24 goles que lleva Everton en la Sub 19), que en su defensa, ha jugado muy poco; y, sin lugar a dudas, los mayores fiascos los constituyen Fernando Arismendi (intrascendente en su juego) e Isaac Díaz (que está lejos de ser el reemplazante del Pato Rubio), quienes han mostrado poco y nada en Viña del Mar.