El carpinterito sigue vivo en árboles del Quintil
Especie cada vez más escasa se puede encontrar en el parque municipal donde también hay raras, cometocinos y rayaditos. En abril tendrán visitas guiadas.
Ver un carpinterito o carpinterito chico golpeteando un árbol es algo que ocurre pocas veces hoy en día. Es que en tiempos de cambio climático y ciudades con más cemento que áreas verdes contar con un espacio donde observar y oír distintos tipos de aves es un verdadero tesoro.
El Parque Quintil es uno de ellos y durante abril se desarrollará el proyecto Celebra las aves urbanas, iniciativa que nace del Laboratorio de Ornitología de la Universidad de Cornell de EE.UU. (que entrega el financiamiento) y que en Valparaíso llevará a cabo la ONG Brote Urbano con la colaboración de la Comunidad Parque Quintil y el Instituto de Biología de la PUCV.
Sebastián Catalán, coordinador del proyecto e integrante de Brote Urbano, cuenta que el objetivo principal de la actividad es poner en valor las aves y crear conciencia en la comunidad sobre la importancia de cuidar parques y árboles.
"Queremos acercar el mundo de las aves a la gente común y corriente, público general, escuelas, niños, adultos mayores. Personas que no tengan un acercamiento muy académico al respecto. Buscamos transmitir la importancia que las aves tienen en el ecosistema, lo valioso que es contemplarlas, escuchar el sonido que hacen", manifestó Catalán.
Este sociólogo, que se ha especializado en educación medioambiental, destacó además que "es hacerles entender a las personas, que si tú tienes una ave que te canta todos los días en la mañana en tu casa, si cortas el árbol donde se posa, esa ave va a desaparecer y no va a volver más".
Diversidad
El Parque Quintil es un importante pulmón para la ciudad y la ONG Brote Urbano, además de especilistas de la UCV, han podido identificar distintas clases de pájaros que viven ahí. Catalán menciona especialmente el carpinterito o carpinterito chico que muchos creían extinto, pero es posible observar en el espacio de la Subida Santos Ossa, lo que ha generado una gran sorpresa y la necesidad de realizar acciones para protegerlo, porque además es una especie propia de la Región de Valparaíso.
También es posible ver raras, picaflores chicos y gigantes, chercanes, rayaditos, cometocinos, los típicos chincolitos, palomas araucanas (torcazas) e incluso codornices. "Tenemos diez especies indentificadas a priori, pero creemos que son muchas más, la mayoría son endémicas (propias) de Chile y de la región", comentó Catalán.
Con esta información, los encargados del Parque podrán desarrollar el plan de manejo del mismo, sus árboles, tomando en cuenta el habitat de las aves.
En las actividades programadas para abril (ver recuadro), los profesionales realizarán una charla introductoria acerca de las aves que se verán en el recorrido y cuál es su canto.