Lucas Suárez Torres - LA Estrella de Valparaíso

Araíz del caso denunciado ayer, acerca del brutal hallazgo de un gato ahorcado en subida Ecuador, el médico Veterinario y Etólogo de la Universidad Santo Tomás, Gonzalo Chávez, cree que esto no sería un episodio para tomar a la ligera.

Si bien no es necesario ser un erudito para entender que nadie en su sano juicio mataría a conciencia a un animal, el académico sostiene que esto se debe a una conducta que iría incrementando las posibilidades de agresiones humanas.

"Hay una línea de investigación en la comunidad científica que prevé que una persona que maltrata un animal tiene una alta posibilidad de que pueda agredir a las personas", destacó.

Para el profesor de Medicina Veterinaria, serían importantes los puntos que tiene en común ser agresor de animales y entre quienes ejercen cualquier tipo de violencia a las personas: falta de control de impulsos, mal manejo de la ira y carencia de empatía con el sufrimiento ajeno. Con ello, el sujeto es incapaz de comprender que sus actos están dañando a otro ser vivo y que incluso que le pueden provocar la muerte.

"En el caso de lo que pasó en Valparaíso, hay también una intención de hacerlo público a la comunidad. Hay una falta de conexión con las emociones", afirma el profesor.

Política pública

El experto va más allá y cree que estas situaciones son un llamado de alerta a la comunidad porque estarían enfrentando una posible situación de riesgos. "Como sociedad se nos olvida que estos episodios de maltrato animal se deben abordar desde una mirada de la salud pública", enfatizó.

Así lo dicen las cifras de la Asociación Americana de Psiquiatría, que dan cuenta que el maltrato animal es un centinela para luego hacerle daño a las personas. En la institución indican que uno de cada cinco maltratadores de animales, es también un violentador de personas.

"En ese sentido, nosotros como sociedad, más aún como médicos veterinarios, deberíamos estar sumamente alerta ante estos episodios y ser capaces de detectar signos de maltrato en nuestros pacientes. Esto porque al momento que estos ocurren, es probable que dentro de esa familia este ocurriendo maltrato", aseguró Chávez.

La aparición de la cruel escena del gato provocó reacciones de rechazo ante el hecho, sobre todo en redes sociales donde se reclama por la falta de vigilancia en el sector. Aunque, hasta el cierre de la edición, no han habido nuevos antecedentes sobre la situación.

Sobre eso, el veterinario explica que hay dos tipos de maltrato entre los más comunes: el primero es denominado "por omisión" y se da cuando se desconocen sus necesidades y no saben satisfacerlos. La segunda es derechamente es daño físico, como fue lo ocurrido ayer.