Novedosa técnica para "destapar" arterias cerebrales en el Van Buren
El procedimiento se utiliza en casos donde existe un ataque cerebro vascular en curso.
Redacción - La Estrella de Valparaíso
Un profundo cambio en los resultados y el pronóstico, en casos seleccionados de pacientes con ataque cerebro vascular, está logrando el servicio de Neurología del Hospital Carlos Van Buren con la aplicación de moderno y complejo tratamiento.
Se trata de la aplicación de la trombectomía mecánica, tratamiento endovascular que cuenta con evidencia científica de peso desde el año 2015 y que desde el 2018 se puede extender incluso hasta 24 horas después desde que comienzan los primeros síntomas. La trombectomía mecánica consiste en destapar una arteria cerebral, con dispositivos específicamente diseñados para ello, que son ingresados al sistema arterial, mediante una punción en la arteria femoral del paciente y visualizados en un equipo denominado angiógrafo, para alcanzar el sitio de la oclusión y extraer el trombo, acción que permite normalizar la circulación de sangre al interior de la arteria cerebral afectada.
Es el caso de Carmen Gómez, porteña de 69 años que llegó hasta la Urgencia del centro asistencial con un ataque cerebrovascular, provocado por la oclusión de un vaso intracraneano.
En el recinto hospitalario fue rápidamente atendida por un equipo multidisciplinario que le ofreció la opción de trombectomía mecánica.
El neurorrradiólogo intervencionista y subdirector del Hospital Carlos Van Buren, doctor Rodrigo Riveros, explicó que "este caso particular se trata de una paciente de sexo femenino, de 69 años, que estaba cursando un ataque cerebrovascular, provocado por la oclusión de un gran vaso intracraneano en que se encontraba fuera de las ventanas habituales para indicar terapias de reperfusión (trombolisis endovenosa hasta 4,5 horas de iniciados los síntomas y trombectomía mecánica hasta las 6 horas de iniciada la clínica), a la que se le indicó el tratamiento descrito, gracias al análisis clínico riguroso del caso y de las imágenes avanzadas de resonancia magnética disponibles en el hospital".
Recuperación
Gracias a la decisión tomada y la trombectomía aplicada, "se pudo desocluir el vaso de tal manera que, el cerebro que estaba con poca irrigación - y por lo tanto ad portas de infartarse - volvió a hacerlo de manera normal y la paciente recuperó los síntomas de su ingreso que significaban no poder mover el lado derecho del cuerpo y no poder comunicarse; hoy día la señora está en buenas condiciones, recuperó prácticamente por completo el movimiento del lado derecho, al igual que el lenguaje y es muy probable que, a su alta, la paciente esté en condiciones de ser autovalente".
Por su parte, el neurólogo del Hospital Carlos Van Buren, doctor Francisco Castilla, añadió que "técnicamente nos dejó muy satisfecho porque había una gran arteria tapada y todo un hemisferio en riesgo, entonces, la intervención permitió que la paciente recuperara espectacularmente su déficit neurológico con el cual llegó".
Tras la intervención, la paciente Carmen Gómez ha evolucionado favorablemente, incluso expresó que "volví a estar consciente cuando ya estaba intervenida, al principio hablaba muy despacio, después, con los días comencé a hablar mejor, ahora me he sentido mejor, tengo algunos problemas, pero estoy mucho mejor, ahora me puedo comunicar".
Tratamiento
Uno de los grandes problemas en el tratamiento del ataque cerebrovascular, es que la oportunidad para ofrecer tratamientos a los pacientes es estrecha y se limita a las primeras horas de iniciados los síntomas. Sin embargo, a raíz de estudios científicos recientemente publicados el año 2018, es posible ofrecer terapias destinadas a destapar las arterias incluso hasta 24 horas del inicio de los síntomas.
Desde el año 2015 se validó internacionalmente el tratamiento llamado trombectomía mecánica, para pacientes cursando un ataque cerebrovascular de hasta seis horas de evolución. Desde esa misma fecha el Hospital Carlos Van Buren comenzó a aplicar el tratamiento gracias a que ya contaba con la tecnología y el equipo humano necesario. Esta experiencia, ha sido clave para poder implementar los avances más recientes y aplicarlos en nuestros pacientes.
El doctor Rodrigo Riveros, detalla que "la novedad es que mediante el uso de técnicas avanzadas de resonancia magnética, se pueden identificar aquellos casos en que, incluso pasadas muchas horas de ocurridos los síntomas, todavía tienen chance de recibir un tratamiento".