Nicole Valverde S.

Ayer se interpuso un recurso de protección contra la Municipalidad de Valparaíso, la Subsecretaría de Justicia, y la presidenta y tesorera de la Sociedad Protectora de Animales Valparaíso Corporación Carlos Puelma Besa, Marina González y Estratia Grambulis, a quienes se sindica como responsables del actual estado del canil de Laguna Verde, donde un grupo de socios denuncia que hay "graves situaciones de negligencia y maltrato animal".

Cabe recordar que en febrero de este año, personal de la Brigada de Investigación de Delitos del Medio Ambiente Metropolitana (Bidema) de la PDI, concurrió a las dependencias de la Sociedad Protectora de Animales de Valparaíso. En el informe policial, el cual ya estaría listo, se determinaría que se estaba llevando a cabo el delito de maltrato animal por omisión, ya que tras las pericias en el lugar, efectivos policiales se habrían encontrado con animales enfermos, en condiciones de hacinamiento y diversos focos de contaminación.

Además en agosto de este año se interpuso una querella por maltrato animal dirigida contra las dos propietarias del recinto, González y Grambulis, investigación que aún está en curso y faltan algunas diligencias para poder formalizar.

Puertas cerradas

Según explicó la abogada Karen Neira, a cargo de las acciones judiciales presentadas en representación de un grupo de socios, "hoy se sigue prohibiendo el acceso a los socios del canil por parte de las dueñas del terreno que coincidentemente son la presidenta y tesorera de la corporación que administra el canil".

En ese sentido, la abogada detalló que "el recurso de protección tiene como finalidad que se logre el acceso de los socios al recinto para cumplir con las labores de cuidado, adopción, alimentación y limpieza que ellos ejercían".

Y por otro lado, el recurso va en contra de la Subsecretaría de Justicia, porque según Neira se busca que ellos fiscalicen el no cumplimiento de los estatutos de la Corporación Carlos Puelma Besa. Además la acción jurisdiccional también incluye a la Municipalidad de Valparaíso por supuestas responsabilidades en temas de índole sanitario.

"Ahí hay focos de contaminación que pueden ser perjudiciales para la salud, y ellos como municipio tenían que intervenir porque tienen facultades de supervisión", concluyó la abogada.

"es una infamia"

Por su parte, la presidenta de la Corporación Carlos Puelma Besa, Marina González, negó las acusaciones de maltrato animal y hacinamiento al interior del canil, y afirmó que "hoy hay 400 perros y fue construido para una capacidad máxima de 700 animales".

"Se han dicho muchas cosas para difamar a mi persona, pero son infamias y yo me voy a querellar en contra de quienes están armando esto", apuntó González, quien respecto a la medida de no permitir el ingreso a un grupo de socios al canil, agregó que "esto no es un capricho, es una necesidad refrendada por los abogados que me asesoran, ya que ellos sacaban a los animales del canil, lo que podía generar graves problemas con quienes viven alrededor, y como institución nos arriesgábamos a sanciones".

Además, subrayó que se han hecho mejoras para mantener en buenas condiciones de salud a los animales, como contratar una médico veterinario que trabaja con la institución que invierte 6 millones y medio mensuales en la mantención de los animales.