A no bajar los brazos
Santiago Wanderers viajó más de 1.200 kilómetros para intentar encontrar un oasis en el estadio Zorros del Desierto. Inició bien, mostrando un juego de buen despliegue, pese a no tener la mayor parte del tiempo el balón. El conjunto verde infló la red mediante una gran jugarreta colectiva, que culminó con un pase filtrado de Cerezo que dejó mano a mano al distinto Reiner Castro para definir sutilmente ante la salida del portero loíno. Todo parecía miel sobre hojuelas, pero el punto de inflexión lo marcó el irregular Viotti al errar una ocasión inmejorable para aumentar la ventaja en los albores del segundo tiempo. Dicho error costaría caro y el huracán naranja se fue con todo ante el cansancio caturro, así marcó en dos ocasiones y se quedó con el triunfo.
Wanderers no tiene que bajar los brazos, salió del fondo de la tabla y hoy aseguró un cupo en la liguilla pese a la derrota. Ramírez debe mejorar el finiquito para la fase dos de la operación retorno.
José Luis Cofré Trevia
Estudiante de Derecho,
Universidad de Valparaíso