El esfuerzo solo dio para empatar
El San Luis de Mauricio Riffo mostró ganas y actitud, pero con eso solo le alcanzó para frenar al sublíder Antofagasta, no para despegar del fondo con el punto logrado.
Claudio Morales Salinas - La Estrella de Valparaíso
No era fácil lo que asumió Mauricio Riffo en San Luis. Un equipo colista, golpeado por el abrupto cambio de técnico y con la obligación de ganarle a uno de los mejores equipos del torneo, Antofagasta. Al final, el esfuerzo del conjunto canario con dos nóveles de la canera como titulares -Estrada y Parada- y sin el goleador Mauro Caballero, alcanzó para rasguñar solo un punto.
Poco y nada avanzaron los canarios desde el fondo la Tabla, y también perdieron los pumas, porque no sostuvieron un triunfo que los dejaba a dos puntos del primero Universidad Católica.
Con poco margen de acción, Riffo igual sorprendió con Mancilla de lateral izquierdo y Lara más adelantado por esa misma franja, mientras Sebastián Parada, figura de la sub 19 vicecampeona nacional, fue al sacrificio ante los duros centrales antofagastinos.
Un ordenado cuadro quillotano no desentonó en el trámite ante un elenco nortino que solo mostró a cuentagotas el fútbol que lo ha encumbrado en el campeonato.
Aun así, y cuando la acción en los pórticos no era frecuente, los pumas aplicaron la táctica fija para dar el zarpazo. Fue en un corner en que los más duchos en el juego aereo distrajeron las marcas para permitir que el volante Gabriel Sandoval clavara un cabezazo en las mallas del Nacho González.
Iban 32 minutos de juego y ese golpe pudo haber tumbado a este apremiado San Luis.
A puro empuje
Pero más allá del escaso fútbol sanluisino, había en el estadio un ambiente especial en que los hinchas canarios empujaron al equipo, aleonados también por el propio Riffo que los llamaba a apoyar desde el borde de la cancha, y que en la semana había pedido el aliento de todos los quillotanos a través de un mensaje que publicó en su cuenbta de facebook.
Antofagasta apuró un poco más a medida que avnzaba el complemento. El venezolano Eduard Bello y el volante Michael Lepe desperdiciaron la opción de anotar un segundo gol que hubiera asegurado la victoria. No lo hicieron y dejaron con vida a un impetuoso cuadro local. Pero Mauricio Riffo no solo se quedó en las arengas, sino que también movió la pizarra y tuvo lectura de partido.
Y aunque los elegidos para salir fueron los más jóvenes, "porque los chicos sintieron el desgaste de un partido de Primera División", dijo el DT; los que entraron aportaron para torcer el destino.
Boris Sagredo movió la pelota con intención en los últimos metros, mientras que con el ingreso del defensor Juan Abarca (quien debutó), la movida fue subir al "Sorry" González como wing, lo que le provocó más de un problema a la defensa antofagastina.
Gol con reclamos
Los pupilos del técnico Gerardo Ameli no aseguraron el partido y en un tiro libre que parecía sin riesgo, apareció ese Paulo Garcés de Colo Colo que fallaba seguido.
Al golero se le pasó entre las manos el lanzamiento de Boris Sagredo que iba en forma de ollazo y el balón terminó ingresando al pórtico del sector norte, desatando los festejos del público que premió el esfuerzo del equipo.
Mientras, el portero antofagastino no se conformó y reclamó hasta después de terminado el partido que alguien lo había empujado en el área, Daniel Vicencio.
Fue la jugada polémica que le dio un punto a San Luis, que sigue en todo caso pegado en el fondo.