Matías Valenzuela

El susto fue grande, pero afortunadamente no pasó a mayores. Una familia del cerro San Juan sufrió un incendio de su casa, pero el fuego fue extinguido antes de que se propagara.

La emergencia ocurrió durante la noche del domingo en una casa de la calle Guillermo Rivera.

El dueño del inmueble, Andrés Reyes, que también es presidente regional del Colegio de Profesores, cuenta que estaba acostado cuando empezó el siniestro.

"Al principio logramos controlarlo un poco con mangueras, fue todo muy rápido, así que no daba para más. Los bomberos llegaron muy rápido, fue todo genial, actuaron de forma muy rápida, principalmente por la ayuda de los vecinos que ayudaron con mangueras, y de hecho fueron ellos quienes llamaron primero a los bomberos. Esto podría haber sido una tragedia mucho mayor", explica.

El fuego se propagó por la techumbre, y quemó algunas vigas de la cocina, pero la estructura de la casa no se vio afectada. Hubo algunos daños por agua, pero nada de mayor gravedad.

"Aquí en el barrio estamos desde el año '81 y somos muy unidos, nos queremos mucho con las otras familias", finalizó don Andrés Reyes.

Sobre las posibles causas del fuego, dice no tener ninguna noción y que van a esperar las pericias correspondientes.

Porvenir bajo

Distinta fue la suerte de una familia de Playa Ancha, cuya casa se incendió durante la mañana de ayer, pero que no pudo ser salvada pese a los esfuerzos de Bomberos.

Fue necesario el trabajo de bomberos de distintas compañías de Valparaíso para el siniestro que afectaba a una casa ubicada en una quebrada de Porvenir Bajo, en la escala 25 del citado sector.

Durante el operativo, los voluntarios tuvieron dificultades para acceder al sector de la casa afectada, que estaba hecha de material ligero, lo que aceleró el avance de las llamas, al punto de ser consumida en su totalidad.

Gracias al actuar de los bomberos, se logró evitar que las casas aledañas se vieran afectadas por las llamas, y la cuenta quedó en una casa afectada.