Polémica por comodato en la Escuela Japón de Playa Ancha
Vecinos abogan por construcción de centro de salud comunitario y un laboratorio clínico popular de la mano de la Corporación Municipal. En Bienes Nacionales, entidad del visto bueno para proyecto, no tomarán "decisiones bajo presión".
Un grupo de vecinos del 2° sector de Playa Ancha sale del edificio Esmeralda con poleras rojas y una causa: "Necesitamos la aprobación del intendente para que Bienes Nacionales renueve el comodato de la Escuela Japón a la Corporación Municipal".
En un tira y afloja que se insinúa al supuesto carácter político del tema, Ana Pacheco, vocera del movimiento 'Recuperando la Escuela Japón', emite opinión tras reunirse en la Seremi de Bienes Nacionales. "Vinimos por la entrega del comodato para trabajar salud comunitaria en el colegio. Nuestro proyecto surge de la comunidad. Hicimos firmas y exigimos que nos entregaran el comodato (o préstamo en uso), ya que venció para la Cormuval. ¡Necesitamos que lo extiendan!".
Marcelo Garrido, gerente de la Corporación Municipal de Valparaíso: "Hemos presentado desde enero de 2017 proyectos, documentos que testimonian nuestra solicitud: que se renueve el comodato a la Corporación Municipal de Valparaíso. Las formalidades han sido cumplidas". Y añadió: "Apelamos una vez más a la Seremi, para que con su voto favorable, esta iniciativa se pueda llevar al Core".
En retrospectiva, a principios del 2012, el municipio porteño de la época determinó una curiosa fusión: mezclar la Escuela Japón con la escuela Naciones Unidas, ambas de Playa Ancha. Sin embargo, una caída libre respecto a las matrículas que, por ejemplo, en 2011 registraron sólo 123 estudiantes, junto con magros resultados en pruebas Simce, gatilló lápida definitiva para la querida Escuela Japón.
En el intertanto, al interior de su ahora silente estructura, se cobijó un canil para animalitos que zafaron al mega incendio del 2014. Luego, especulación: ¿destino para mormones, retén policial, instituto o centro de salud?
Espacio Valioso
En la propuesta de recuperación del espacio, la idea de los vecinos -junto a la municipalidad- sería crear una escuela de salud comunitaria, centro de adulto mayor, formación de terapias complementarias y un laboratorio clínico popular. Entre los supuestos beneficios: exámenes de hematología, bioquímica, orina, deposiciones, inmunología. Todo, estiman, con valores hasta tres veces más bajos donde los porteños podrán hacer uso del sistema.
Marco Fernández, subdirector de innovación y proyectos del área de salud de la Cormuval, profundiza: "Estamos sumamente preocupados: necesitamos comenzar las obras cuanto antes". Acerca del laboratorio clínico popular, afirma que habrán muestras de sangre y de orina, con exámenes de especialidad, "que no cubre ni Fonasa e Isapre, y a costos populares", avala Fernández.
No es todo: en ese espacio, se contemplaría instalar una clínica dental popular, con cinco sillones dentales, una sala de rayos dental y un laboratorio dental para prótesis e implantes. También una escuela de terapias complementarias, "que vecinos se formen en un nuevo oficio", opina Fernández.
Para Ana Pacheco, de la junta de vecinos N°43 Playa Ancha, es "un proyecto sustentable. Tenemos los insumos, la fundación sin fines de lucro (ONG Good Neighbors). Gente que se va a instalar gratuitamente. La seremi quedó de entregarnos una respuesta la próxima semana. Nos tienen que dar el comodato".
Bienes Nacionales
Del otro lado, Rosario Pérez, seremi de Bienes Nacionales, aclara: "El objetivo de Bienes Nacionales es encontrarle el mejor uso a los inmuebles que son de gran importancia para la región. Lo que estamos haciendo es encontrar el mejor proyecto para ese lugar: que tenga el mayor impacto en la comunidad".
Pérez comenta que como ministerio no ponen en duda "las buenas intenciones que tiene la Cormuval y toda la comunidad". Por lo mismo, acota la seremi de Bienes Nacionales, "hemos transparentado dudas. Adquirí algunos compromisos con ellos, en hablar este tema lo antes posible, con el intendente regional y con el ministro de Bienes Nacionales, Felipe Ward", para poder así "entregar plazos y tiempo concretos". Eso sí, reconoce que no puede ocurrir que la Escuela Japón definitivamente quede en la situación que está hoy en día: en abandono desde el 2012. "Eso es lo que no queremos para Valparaíso. Les pedimos que tengan paciencia, que las cosas se irán dando como corresponde". Pero con un alcance, de acuerdo a Rosario Pérez: "Tenemos que poner plazos y cifras para el mejor uso posible: no lo entregamos al primero que llega y patalea más, sino al mejor proyecto para cada inmueble. No tomamos decisiones bajo presión".
En tanto, el ministro de Bienes Nacionales, Felipe Ward, anunció ayer que para mayor transparencia se definirá vía licitación pública el destino de históricos edificios porteños como Café Vienés, la tercera comisaría de Carabineros de Barón y Escuela Japón.
Jorge Sharp, jefe comunal, ya dio postura. "Hemos sostenido diversas reuniones, tanto con el intendente como la seremi. Esperamos que ambos cumplan con el compromiso que asumieron tanto con la comunidad como la alcaldía de concretar este comodato".