España decepcionó en Rusia 2018, y la tentación de culpar el cambio de técnico a última hora es el primer argumento al alcance. El histórico ex central del Real Madrid, Fernando Hierro, fue llamado de urgencia... a un día del inicio del torneo, para reemplazar al entonces seleccionador, Julen Lopetegui, destituido fulminantemente tras anunciarse su contratación como próximo entrenador merengue. También dejará su cargo como director deportivo de la Real Federación española de Fútbol. Fernando Hierro ya había asumido este cargo entre 2007 y 2011, coincidiendo con un momento especialmente glorioso para la selección, con los títulos en la Eurocopa de 2008 y en el Mundial de 2010.

Franceses y belgas se verán las caras por semifinales mañana en este recinto para 64.000 localidades. La construcción del nuevo estadio del Zenit de San Petersburgo no fue sencilla. La obras se iniciaron en el 2007, 10 años antes de su apertura. En ellas se presentaron numerosos retrasos que hasta comprometieron la finalización del coloso. Pero el nombramiento de Rusia como sede del Mundial hizo que finalmente, tras una inversión de 1.100 millones de euros, este nuevo estadio sea una realidad. El estadio está construido en una isla, en el lugar donde se ubicaba el vetusto estadio donde había jugado el Zenit hasta hace no mucho, el S.M. Kirov, un clásico recinto deportivo con pistas de atletismo de estilo soviético. El interior del coloso está formado por la estructura clásica de dos anillos enormes de graderías y en medio una zona doble para localidades premium. Destaca la verticalidad de las gradas y el colorido azul de los asientos.