A 50 años de la hazaña coronaria que cambió la cirugía nacional
El 28 de junio se cumple medio siglo desde el primer trasplante de corazón liderado por el Dr. Jorge Kaplan Meyer. Dos de sus discípulos recuerdan este hito y detallan algunas actividades conmemorativas.
A las 12.30 horas del 28 de junio de 1968, sólo seis meses después de la primera operación de este tipo efectuada en Sudáfrica por el doctor Christian Barnard, el doctor viñamarino Jorge Kaplan Meyer, junto a su equipo, entró a uno de los pabellones del Hospital Naval Almirante Nef de Valparaíso y luego de 2 horas y 49 minutos, concluyeron exitosamente el primer trasplante de corazón realizado en Chile.
La paciente fue María Elena Peñaloza, una joven costurera de 24 años de edad que padecía de vulvopatía congénita con dilatación del miocardio. En la operación le trasplantaron el corazón del joven de 21 años Gabriel Véliz, muerto debido a un tumor cerebral.
50 años
En solo unos días se cumplen 50 años de aquel procedimiento que instaló a nuestra larga y angosta faja de tierra en la senda científica mundial como el tercer trasplante efectuado en América Latina, tras Brasil y Argentina, y el número 23 en el mundo.
Medio siglo ha transcurrido desde aquella hazaña, sobre la que por entonces, el mismo doctor Kaplan comentó con su particular personalidad "lo hice a la chilena", relatando que trasladó el órgano del donante en una "olla comprada de su bolsillo" .
Ernesto Aránguiz Santander, jefe del Servicio de Cirugía Cardiovasular y jefe del Programa de Trasplante cardíaco del Hospital Dr. Gustavo Fricke y discípulo del Dr. Kaplan destaca la trascendencia de esta intervención, especialmente poniéndola en el contexto del Chile de fines de los '60.
"Uno tiene que ubicarse cómo era la época hace 50 años atrás, cuando no existían todos los medios de comunicación que actualmente existen ni mucho menos la tecnología que por aquel tiempo estaba muy por debajo de lo que hoy nos parece tan natural", precisó el Dr. Aránguiz.
El profesional recordó que cuando en diciembre de 1967 se supo la noticia en el mundo de que había habido un trasplante de corazón en Sudáfrica fue una noticia excepcional.
"Conocer que era factible que el corazón de otro ser humano se implantara en otro eso generó toda una discusión en el plano de lo científico y la revolución que significaba esto y también en el plano de lo ético", recordó Aránguiz.
Por aquellos años, Aránguiz era tan solo un adolescente, y asegura que la noticia fue tan extraordinaria que era simplemente como que dijeran "que un hombre había llegado a Marte".
Serían varios años después que Aránguiz se convertiría en médico y cuando tendría el privilegio, como reconoce, de trabajar con el hombre tras esta hazaña.
"Don Jorge desde el momento en que supo que esto era factible - trasplantar un corazón - se puso a trabajar con su equipo intensamente en la tarea de poder conseguir un trasplante. Desde siempre él tuvo una particular predilección por el trabajo experimental, siempre trabajó mucho en eso, fue un adelantado para su época, por lo tanto la planificación del trasplante cardíaco fue una tarea larga, de meses, no solamente en la parte quirúrgica sino también en la parte médica, trabajó con bioquímicos de la universidad...para enfrentar el trasplante en todo su contexto", detalló Aránguiz.
La realidad actual, con una Ley de donación no plenamente satisfactoria, pero existente, dista de la realidad de los fines de los '60.
Viñamarino en valpo
Para quienes fueron formados por Jorge Kaplan Meyer y trabajaron hasta sus últimos días junto a él - Kaplan falleció el año 2009 - que haya sido este médico quien llevara a cabo el primer trasplante cardíaco no fue fruto de la casualidad ni del azar.
"El doctor Kaplan es un personaje único e irrepetible. Era una persona extremadamente sencilla. Él tenía una gran vocación y amor por la medicina y por lo que hacía y siempre estaba muy preocupado de varios aspectos: en primer lugar de las personas, a quienes trataba por su nombre y apellido. En segundo lugar por el conocimiento y la enseñanza y siempre estaba muy inquieto con respecto al conocimiento, hasta el último momento", comentó el médico.
Pero un aspecto fundamental, a juicio de Aránguiz, era que para el Dr. Kaplan los límites no existían.
"Independientemente de que fuéramos un país pequeño, para don Jorge no existían los límites, él consideraba que las limitaciones no estaban dadas por lo material, sino que a veces por las mismas fronteras que uno se ponía. Él siempre fue un hombre joven, entendiendo la juventud como la capacidad de estar siempre disponible a aprender. Creo que fue eso lo que hizo que él se lanzara en este proyecto como en tantos otros", destacó Aránguiz.
¿Y cómo fue que esta hazaña se concreta en Valparaíso? Para Aránguiz, la Ciudad Puerto ha sido también pionera en otros ámbitos - el primer diario, la primera compañía de Bomberos, el primer equipo de fútbol - por lo que tampoco fue casual que esta hazaña médica se consolidara en Playa Ancha.
"Esto se dio sobre todo más que por la geografía porque don Jorge fue siempre capaz de constituir equipos y para desarrollar un trasplante cardiaco, esto no depende de una persona, requiere sin duda de un buen líder, pero especialmente de un buen equipo", resaltó Aránguiz.
Para otro de los discípulos y amigos del Dr. Kaplan, el Dr. Oneglio Pedemonte Villablanca, presidente de la Fundación Cardiovascular Dr. Jorge Kaplan Meyer, uno de los aspectos más relevantes del primer trasplante cardíaco es que resultó y resultó bien.
"La terapia de trasplante cardíaco se consolida en el tiempo y es todavía, hasta ahora, después de 50 años, la única terapia que puede sacar adelante a pacientes que tengan alguna disfunción de algún órgano vital terminal", destacó Pedemonte.
A pocos días de que se cumplan 50 años del trascendente primer trasplante cardíaco en Chile, el Dr. Aránguiz destaca que esa hazaña fue la demostración de que "sí se puede".
"Demostrar, como dicen en el fútbol, que sí se puede, independientemente de las condiciones. El Chile de ese entonces no era el de ahora. El Chile actual es un Chile potente, ganador en muchas cosas, en ese entonces, era un país chiquitito y se pudo, se puede. Esa fue una de las cosas extraordinarias que nos enseñó este hito encabezado por el Dr. Kaplan", precisó Aránguiz.
Actividades
Desde hace meses, la Fundación Kaplan se encuentra llevando adelante la organización de una actividad que permita recordar y conmemorar este hito y que, como tantas cosas, no pase inadvertida. Para ello, la organización ha contado con importantes asociados, como la Armada de Chile, el Colegio Médico de la Región de Valparaíso y la municipalidad de Valparaíso.
El programa considera una actividad el mismo jueves 28 de junio en el ex Hospital Almirante Nef de Playa Ancha y posteriormente el descubrimiento de una placa conmemorativa que recuerde el primer trasplante en Chile.
"Pensamos que es un hecho que no puede pasar inadvertido, sobre todo en una región donde siempre nos quejamos de mucha presión, pero sin embargo fuimos y creemos que somos capaces de sacar adelante proyectos tan increíblemente emprendedores como éste, como fue el trasplante cardíaco en su momento", destacó Pedemonte.