Cirugía genital, otra forma de recuperar la seguridad
Existen diversas intervenciones que ayudan a mejorar la sensación de fricción, aumentando el placer durante la relación sexual vaginal.
Con la paulatina apertura a hablar temas de sexualidad y también el acceso a un mayor poder adquisitivo en varios sectores de la población, dentro de las cirugías plásticas se considera que las intervenciones ginecológicas son unas de las que han tenido mayor crecimiento durante los últimos diez años.
En general, este procedimiento consiste en una intervención en los labios de la vagina, que mejora su aspecto y también su funcionalidad en la vida íntima.
Pero existen distintos procedimientos para intervenir la zona íntima femenina. Entre ellos, los más solicitados son la labioplastia y el rejuvenecimiento vaginal.
En el caso de la primera intervención, consiste en el retiro quirúrgico del exceso de tejido de los labios menores . El segundo considera el estrechamiento de la entrada y del cilindro vaginal interno, ya sea en forma quirúrgica o por láser. Aquello permite devolver a la mujer la sensación de fricción y placer perdido a raíz, principalmente, producto de los partos.
El cirujano plástico Diego Rodríguez explica que "este tipo de cirugías son generalmente 100% decisión de la mujer, quien es la que asume el problema, investiga, se informa y pide la consulta para resolver las dudas más técnicas que sólo un profesional podría responder, tales como duración de la cirugía, cuidados del post operatorio, costo, riesgos, entre otras variables".
El profesional agrega que cuando ellas deciden consultar, "los principales motivos son la pérdida del placer sexual y el descontento de las pacientes con su zona íntima, que muchas veces afecta incluso su autoestima".
Recuperando el placer
Si bien, desde el punto de vista estético, existen muchas mujeres que deciden someterse a una labioplastia, para solucionar las molestias o incomodidad al usar ropa más ajustada o al realizar actividad física, un alto número, que ya no está en etapa reproductiva y que ya tuvo hijos, opta por ésta para recuperar el placer sexual perdido a raíz de la poca fricción al momento de tener relaciones sexuales.
El lifting de labios mayores es otra de las intervenciones más pedidas para la zona íntima. La cirugía permite una mejora estética cuando éstos tienen una apariencia flácida y generan incomodidad .
En esos casos se hace una pexia (levantamiento) con suturas, movilizando el tejido suelto, de manera que quede en un pliegue y la cicatriz no se note. Asimismo, puede sumarse a una lipoinyección, que deja un mejor contorno y una apariencia más juvenil.
Otra incomodidad que sienten muchas mujeres cuando están en la intimidad es el abultamiento de la zona púbica. Para esos casos existe la denominada "lipoaspiración del monte de venus".
En esta cirugía, se quita la grasa, mejorando el contorno en esta zona . Además puede asociarse a un lifting de pubis, en el que se reposicionan los tejidos hacia su posición natural, logrando un aspecto más armónico.
En el caso de las pacientes, por lo general tienen sobre los cuarenta años y están empezando a preocuparse más de ellas mismas. Los hijos ya crecieron y salieron del hogar, por lo que ellas buscan retomar de mejor forma su vida sexual. Una especie de segunda juventud llega a sus vidas.
En la última década un número cada vez mayor de mujeres llegan a consultar disconformes con su zona íntima. "Las pacientes se sienten menos incómodas y con menos temores de acercarse", opina Rodríguez, quien además recomienda visitar a cirujanos acreditados por la Superintendencia de Salud.
Junto con ayudar a mejorar la sensibilidad y ayudar a tener mayor sensación de placer, las cirugías ginecológicas de este tipo también se emplean para mejorar los síntomas de la incontinencia urinaria. Un problema que puede aparecer durante cualquier etapa de la vida de la mujer, pero especialmente luego de que ha tenido partos.
Mirian Mondaca Herrera
salud@estrellavalpo.cl