Valeria Barahona

Dicen que "los perros comen de todo" pero, al igual que las personas, pueden sufrir de problemas digestivos, por lo que es un tema importante con qué se los puede y no alimentar.

Un dato transversal es no permitir que los perros coman huesos muy frágiles -como los del pollo-, porque se podrían atragantar. Una opción es permitir que mastiquen rótulas de vacuno o patas de cerdo, dice la criadora de canes Boyeros de Berna, Hoshi Oye, añadiendo que hay una tendencia entre algunos criadores que "consiste en no dar pellet a los perros, sino que sólo alimentos crudos". Esto se conoce como Método Barf.

En caso de aplicar este plan, la veterinaria Macarena Donoso recomienda que si el perro "nunca ha comido más que su pellet, no se puede llegar y darle (otra cosa), tiene que ser poco a poco", porque el sistema digestivo no está acostumbrado y "deja de funcionar optimamente, y ahí viene la diarrea". Una buena idea para que el perro comience a comer frutas y verduras es "mezclarlas con su pellet, partiendo poco a poco, con una cucharadita de algo, e ir aumentando con los días, así su sistema se acostumbra", añade Donoso.

Este método funciona, dice la veterinaria, ya que las "verduras verdes y frutas frescas reducen hasta en un 70% la posibilidad de cáncer" en los perros.

Por otra parte, la veterinaria Astrid Standen, de Royal Canin, sostiene que "lo más importante es ofrecer a los perros una dieta que sea completa y balanceada, entregando un alimento seco, formulado según la edad, la raza o si son cachorros o adultos. En esos alimentos van a encontrar todos los nutrientes que ellos necesitan y en la proporción adecuada. Teniendo esta base, no es necesario incorporar otros alimentos".

Ni cebollas ni papas

Hay vegetales y frutas de uso diario que los canes jamás deberían comer. Uno es "la cebolla, porque les genera anemia", dice Donoso. Por esto, dar una empanada de pino al "mejor amigo del hombre", no es buena idea.

Astrid Standen enfatiza que "la cebolla y el ajo tienen componentes que los perros no pueden metabolizar, además que son irritantes de la mucosa gástrica, entonces les pueden provocar gastritis y vomitar".

Otro alimento que Donoso pide evitar es "la uva, por su índice glicémico", además de "las pepas y tallo de la manzana, que contienen cianuro" a un nivel tóxico para los canes.

La cáscara de la papa también tiene sustancias "que pueden ser nocivas, como la solanina, que puede provocar alergias alimentarias", dice.

Chocolate

El chocolate, dice Donoso, "es tóxico para perros y gatos (...), mucho mejor es la algarroba, que es chilena y es un sucedáneo del chocolate, por lo que no sólo es rico, sino que muy saludable para los perros".

"El zapallo es uno de los vegetales que más me gustan para los canes", afirma Donoso, porque "contiene fibra, lo que es bueno para aliviarlos en caso de diarreas. Además, esta propiedad ayuda a controlar los niveles de azúcar en la sangre". Otros vegetales en la misma línea son la espinaca, zanahoria y betarraga, estas últimas dada su abundancia "en betacarotenos y en fitonutrientes. Estos últimos están asociados a anticancerígenos", detalla Donoso.

Las frutas más recomendables para el regalón son las manzanas, berries (arándanos, frutillas o murtas) y el plátano.

Hoshi Oye dice que "es importante no 'dar las sobras', porque son altas en grasas condimentadas y tienen mucho carbohidrato, especialmente el pan, el arroz y los tallarines, que en realidad no les aporta mucho".