Sebastián Mejías Oyaneder - La Estrella de Valparaiso
Se cumplieron ocho meses desde que el pasado 1 de abril, fuera asesinado el joven estudiante de medicina veterinaria- ligado al mundo del punk- Camilo Navea, supuestamente a manos de un vendedor de sopaipillas. En unos días más- 12,13 y 14 de diciembre- seremos testigos de la audiencia de formalización del principal sospechoso.
Es por eso que con el objetivo de demostrar a la ciudad que están más vivos que nunca, se movilizaron ayer familiares y amigos de Camilo, fundamentalmente por dos razones: pedir que se haga justicia por la víctima, negando lo que se dijo por la prensa, y también velar por la igualdad animal.
Juan Carlos Oróstica, uno de los organizadores de la convocatoria, aseguró que "se dijeron muchas cosas negativas de Camilo, como que era un punky que se metió en una pelea de curados. Daban a entender que un punky no importaba mucho. Sin embargo, las cámaras de seguridad de Aníbal Pinto dieron cuenta de que Camilo no incitó ninguna pelea y que lo único que hizo fue defender a un perro callejero y por eso lo mataron".
De ahí el interés de rendir un homenaje a Camilo Navea, aunque también el otro foco de la marcha, puso en el centro del debate los reglamentos que, hace unas semanas, fueron emitidos por el Ministerio de Salud, relacionados a la tenencia responsable de animales.
Sobre eso Dann Espinoza, activista, contó que si bien el reglamento ya fue retirado, pretendía tener más peso que la propia Ley de Tenencia Responsable.
Juan Carlos Oróstica recalcó sobre ese tema que, "lo principal es que se deroguen todos los artículos. Uno de ellos establecía que para cada mascota se necesitaba contar con al menos cien metros cuadrados".
Entre las manifestantes se encontraba la dolida madre de Camilo, Glenda del Canto, quien todavía no logra hallar calma ni entender cómo fue que su hijo perdió la vida, dice, a manos de un delincuente.
Pese a todo, se sintió acompañada por tanto activista, que llegó a defender la igualdad de derechos para todos los seres vivos.