¿Qué pasó con el castillo de Serrano?
Tras décadas de glamour y otras más oscuras, el edificio ubicado en calle Serrano 580 fue vendido a privados.
Cuenta la leyenda que hace un par de años, allá por la década del '90, un batallón completo de marinos se detenía a la altura de la calle Serrano 580 para rendirle honores a "La Nonna". Fue para un 21 de mayo cuando dicha expresión de respeto y admiración se dio para Elisa Cuneo Lastra, dueña del gigantesco inmueble de cinco pisos, que emula a un gran castillo medieval.
La construcción fue heredada por la hija mujer de sus padres Cipriano Cuneo y Escolástica Lastra, quienes llegaron desde Génova, Italia a Valparaíso hace más de cien años. La edificación se levantó en 1912 y, según los planos originales ésta contaría con ocho pisos; sin embargo sólo se levantaron cinco, de los cuales tres quedaron en obra gruesa hasta el día de hoy.
El edificio fue construido por el comerciante español Francisco Caralps, que llegó desde Iquique y pidió que en la edificación se instalaran vigas de trenes en los muros tras el terremoto de 1906. Tras la apertura del canal de Panamá, Francisco Caralps abandonó al construcción y se fue a Europa, debido a que supuestamente Valparaíso perdería terreno como Puerto.
En el edificio se ubicó por años el famoso restorán La Nave, un local de venta de pescado frito, y la tradicional boite Las Conejitas, en donde esperaban con los brazos abiertos a los marinos que llegaban al Puerto.
Pero aquellos años locos y de vanguardia quedaron atrás para el castillo y su última dueña, Elisa Cuneo, ya que con el tiempo la vieja estructura se comenzó a debilitarse.
Actualmente los vecinos del tradicional Serrano 580 no saben nada de "La Nonna"; en los restoranes que se ubican frente al inmueble dicen que la mujer hace aproximadamente un año que no se ve en el lugar y un gigantesco cartel de "Se vende", cuelga en una de las esquinas del edificio.
fue comprado
La Estrella de Valparaíso se contactó con los corredores que ofertaban el antiguo palacio del Puerto para saber quién es el actual dueño, obteniendo un seco y rotundo: "Es información privada, ya que fue comprado precisamente por un privado".
Quien sí habló con La Estrella fue don Sergio Vega, quien hace 15 días guarda en el lugar su carro con el cual vende jugo de frutas en las calles de Valparaíso. "Vengo de Santiago a Valparaíso a trabajar y encontré este lugar para guardar mi carro; pago $1.500 pesos diarios y la pega ha estado buena".
Sea cuál sea el destino del querido castillo de calle Serrano lo que está claro por parte de la municipalidad de Valparaíso es que el edificio es inmueble de conservación histórica y además está ubicado en Zona Típica, declarara Categoría de Monumento Nacional. También se encuentra dentro del sitio de Patrimonio Mundial, por lo que cualquier intervención debe respetar los valores arquitectónicos y el entorno.