Horrible: bala loca impactó en la nuca a niño de tres años
El pequeño estaba en su jardín infantil, ubicado en la comuna de Limache, cuando recibió el proyectil y fue operado de urgencia en el hospital Carlos van Buren para salvar su vida. El disparo salió desde un sitio eriazo colindante al recinto.
Juguetes esparcidos por el piso, y una casa de plástico perforada por un proyectil. Los funcionarios de Labocar estiraban huinchas en el suelo y rayaban el piso para determinar la trayectoria de la bala. Todo esto, ante el flash de las cámaras que registraban la inquietante "escena del crimen" que tuvo lugar en pleno patio, de un jardín infantil de Limache.
El aire era de tensión e incertidumbre. Autos y camionetas llegaban a toda velocidad, levantando el polvo del camino de tierra que conecta con la calle Bulnes, en el sector de Limachito. Los apoderados descendían ansiosos del vehículo, buscaban a los niños y los abrazaban contra su pecho, agradeciendo la suerte que tuvieron. De los 50 niños que asisten al jardín infantil "Tierra y Luz", hubo uno que no corrió con la misma fortuna.
Pasado el mediodía de ayer, I.J.Z.B,de tres años y medio era trasladado de urgencia al hospital Carlos Van Buren, luego de haber recibido un disparo en el sector que comprende el cuello y la nuca, bajo enigmáticas condiciones.
"Lo que nosotros tenemos como información es que este hecho se produce cuando los niños estaban en el patio del jardín, estaban realizando sus actividades escolares, bajo la supervisión de las tías, y desde el exterior entra una bala", explica el alcalde de Limache, Daniel Morales, y continúa: "Por el tamaño (del orificio en la casa de plástico) se ve que es un proyectil de pequeño calibre, puede ser un calibre 22, pero todavía se está viendo la tesis".
¿accidental?
El patio donde fue herido el menor, colinda con un sitio eriazo con abundante vegetación y algunos caballos que retozan sueltos entre las rejas, este terreno pertenece a la municipalidad limachina, y se presume que el disparo podría haber sido percutado desde allí.
Los primeros boletines informativos apuntaban a que se trataba de una bala loca proveniente de la villa Queronque, pero esta información fue relativizada por el propio edil limachino, quien observó que la distancia entre el jardín y Queronque es muy grande como para que una bala entrara con ese ángulo.
"Hay ciertas dudas en razón de si fue una bala loca o si fue un proyectil dirigido hacia el lugar, por la precisión del tiro, y eso lo está viendo Carabineros con personal de la Sip y de la OS9, más el fiscal que están todos trabajando, justamente para poder determinar en que condiciones se ejecutó el disparo. Estamos distantes de la vía Queronque por lo tanto, también es bueno no estigmatizar hoy día que pudo haber sido una balacera desde allá. Es mucha la distancia que hay hacia allá", advirtió el edil.
Minutos de terror
La mala fortuna fue la que afectó al pequeño herido. La programación de actividades didácticas preparada por las parvularias indicaba que el día de ayer correspondía la jornada de baile entretenido, así que los niños estaban revoloteando en el patio trasero, cuando I.J.Z.B. recibió el disparo.
"Dicen que llegó de repente una bala y el niño que venía entrando último recibió el disparo", cuenta el abuelo del niño mientras recogía su otra nieta que asiste al mismo jardín limachino.
La labor de las parvularias fue crucial, pues una vez que escucharon el estruendo, resguardaron a los pequeños dentro del inmueble y tomaron al niño herido para llevarlo ellas mismas al hospital de Limache, donde pudo recibir los primeros auxilios antes de ser derivado al hospital de Valparaíso.
"Inmediatamente las tías tomaron la decisión de llevar al niño al hospital /de Limache), y desde ahí se produce la estabilización del menor para poder llevarlo al hospital correspondiente", relata Patricia Colarte, jefa del Departamento de Educación del municipio local. Agregó que nunca antes habían vivido un hecho similar en el lugar.
Lo vieron todo
Ante lo inimaginable de la tragedia, los apoderados del sector llegaron desaforados en busca de sus niños, pues las primeras informaciones que circulaban se limitaban a expresar que un niño recibió un disparo, sin dar mayores detalles.
Como el hecho ocurrió al mediodía, la mayoría de las personas que llegaron correspondían a abuelos y abuelas de los niños que llegaron desesperados-
Ese fue el caso de Melania Zapata, que tiene a sus tres nietos de 1, 2 y 3 años en el recinto preescolar hace solo tres semanas.
"En la villa Queronque se escuchan balazos de vez en cuando, pero aquí en Limachito no. Yo me enteré porque mi mamá me avisó que en la radio habían avisado de esto. Después una amiga me avisó que pasó esto. Me vine en camioneta urgente, porque decían que había un niño baleado cuando estaban jugando en el patio. Acá estaba lleno de gente, porque esto fue muy preocupante, uno los deja acá al cuidado y no se imagina que pueda pasar esto", menciona la mujer, agregando que su nieto más grande presenció el hecho, pero sin dimensionar lo que acababa de ocurrir. "Él es chiquitito, así que no entiende mucho lo que pasó", menciona Melania.
Parecido a este es el testimonio de Susana, que llegó en busca de su hija y su nieta. "Imagínate como estoy yo porque mi nieta está acá, y mi hija trabaja acá; así que volamos a venir a buscarlas. Ella (su hija) pudo acompañar al niño que está muy grave según me contaron. Yo me tiré a la niña y me la traje. Lo único que supe es que los niños lo vieron todo. Ella (su nieta) me dice que 'El Isaías tenía sangre ahí' (se apunta la nuca). Esto fue muy chocante para ellos", cuenta Susana mientras abandona el lugar apretando a su nieta contra su pecho y besándola en la frente.
Diagnóstico
La tarde de ayer se entregó el último parte médico de la salud del menor en el hospital porteño donde el diagnóstico, pese a la gravedad, es alentador.
"Isaías ingresó a pabellón donde el equipo de neurocirugía de nuestro hospital realizó la extracción del proyectil que estaba alojado en el hueso occipital y que, afortunadamente, no penetró en el cerebro, lo cual da un mejor pronóstico", señaló el cirujano pediatra Luis Villarroel, del hospital Carlos van Buren. Junto con lo anterior, explicó el galeno, se le realizó un aseo quirúrgico y se le practicó un scanner de control que mostró que no hay una lesión intracerebral, sólo un edema del cerebelo. Ahora el menor se encuentra estable dentro de su gravedad y el pronóstico sigue siendo reservado hasta al menos 24 o 48 horas después de producido el suceso.
"Son auspiciosas las noticas que se reciben por parte del equipo de neuroriugía al no haber daño intracerebral. Dada su condición, la alta energía que tiene el ingreso de proyectil a la cavidad craneana puede producir un aumento de la presión intracraneal y eso puede comprometer las funciones del cerebro y es lo que se va a monitorizar", sostuvo el médico.