Manuel Gómez Poblete

Al igual que los seleccionados adultos (que nos dejaron sumidos en la más absoluta tristeza), los chicos de la Sub 17 de Chile no lo están pasando nada de bien en el Mundial de la categoría que se está llevando a cabo en la lejana India. Y es que tras un pésimo estreno ante Inglaterra (y un 0-4 que si bien dolió... fue el fiel reflejo de lo que sucedió en el imponente estadio de Calcuta), se aguardaba por un Chile distinto o con otra actitud y disposición, ayer ante Irak.

Pues bien, nada de aquello aconteció y con pasajes realmente tristes -en cuanto al nivel de juego exhibido- Chile volvió a caer, ahora por 0-3 ante los asiáticos. Un equipo nervioso, timorato y sin ninguna actitud es el que nos presentó ayer el técnico Hernán Caputto, con jóvenes que si bien... a ratos luchan y buscan una mejor suerte, no encuentran los caminos para al menos, dar la pelea.

Y es que al margen de caer por 0-3 ante Irak (y eso que el rival, desperdició un penal a los 91'), fue la actitud timorata y cautelosa que mostró Chile, incluso cayendo desde temprano producto del gol de Mohammed Dawood a los 6'.

Con el marcador en desventaja, Chile no se atrevió a atacar a Irak en el primer tiempo y sólo en el inicio del segundo, insinuó algo más ante un rival que con otro tanto de Dawood (68') y un autogol de Diego Valencia (81'), sentenció la lucha.

Ahora, la única chance que tiene Chile -para clasificar como mejor tercero- es superar el sábado a México (11.30 horas). No obstante, viendo el nivel de uno y otro, la misión es casi imposible.