Lucifer tendrá su propia película en la zona
"Las Rosas del Diablo" se llama el largometraje que se está preparando en la provincia de Quillota y que será parte de una trilogía.
Mirian Mondaca - La Estrella de Quillota
La neblina que cubre la cima del cerro La Cruz de Hijuelas seduce a Héctor Olivares con un inusitado magnetismo. Siempre que dirige sus ojos sobre el enigmático lugar no puede dejar de poner en su mente cada escena de un trabajo audiovisual que ha moldeado con paciencia, casi como un padre preocupado que intenta plasmar en su retoño lo mejor de sí. No por nada, en esas tierras surgió la inspiración.
Han sido casi cinco años en los que cada etapa de "Las Rosas del Diablo" se ha conocido entre los habitantes de la provincia a través del boca a boca, de forma idéntica a las leyendas hijuelenses, que son el tema del filme. Y, claro, su protagonista no podía ser otro que Lucifer. "Esta película no es de terror en sí, aunque tiene tintes, es fantástica, mágica y el personaje más popular en las historias que cuentan los abuelos y los padres de acá es el Diablo. Tenía que ser el personaje principal", comenta Héctor.
Vuelve por lo suyo
El largometraje, que tendrá una duración cercana a las dos horas, es una mezcla de diferentes leyendas de Hijuelas, cruzadas por la figura del Diablo, gracias a la capacidad creativa de Héctor. El hijuelense es el " maestro chasquilla" en este trabajo totalmente autogestionado; las hace de director, guionista, productor, y lo que sea necesario.
Como autor del guión, Héctor revela que de todas las historias que consideró, la leyenda del cerro La Cruz y La Puntilla de Los Novios de Romeral son las madres de la trama. "Hice que todas fueran una, pero las que son principales son las del cerro, donde decían que bajaba el diablo a quemar las cosechas y por eso se puso la cruz. La otra es la de Romeral, donde dicen que se dieron vuelta unos novios, que el diablo se había enamorado de la niña. Se dan vuelta en un carruaje, caen al río y desde ahí penan", indica.
Esas leyendas hacen que la intriga sea un factor predominante en el argumento del largometraje, que -además del "Cola de Flecha"- tiene como coprotagonistas a dos mujeres: María Rosa y Rosa María, madre e hija. De ahí el nombre de la película.
Mientras revisa los clips de vídeo que edita a toda marcha en su computador, Héctor recalca que desde el inicio, la película considera el deceso de una de las protagonistas. "María Rosa ya está muerta, entonces se va contando por qué el diablo está detrás de Rosa. Aparece un hombre, como un conde y el diablo está detrás de la hija del hombre viudo. Ahí él hace un pacto con el diablo y sin querer vende el alma de la hija. (...) después se da a entender también que la mamá había hecho un pacto con el diablo. Entonces, él viene por ella, la hija", detalla el director.
Trilogía
Este comunicador audiovisual está empeñado en terminar la post producción de la película a fines de octubre. Luego de eso, pretende estrenarla en Hijuelas y Quillota, ya que en esta última comuna se grabaron las escenas, ocupándose lugares emblemáticos como el Regimiento Granaderos, el cementerio de cerro Mayaca y los cerros de El Boco. "Sería muy bueno poder mostrarla en algún centro cultural y después la pondré en la web para que todos tengan acceso a verla", dice.
El estreno de la cinta estará lejos de ser el fin de la relación de Héctor con las leyendas de la zona, porque el hijuelense ya tiene listo un guión para una nuevo largometraje, que será la segunda parte de una trilogía. El realizador adelanta que, "mi idea es hacer tres películas. Empecé con la del medio, después sería el origen de las Rosas, que es como la historia de La Quintrala, y después - en una tercera parte - sería lo que pasa con la hija de Rosa".
Desde que junto a su equipo de trabajo, entre los que están vecinos y amigos, hizo las primeras grabaciones el 2013, y luego cuando comenzó de lleno el proceso, el 2014, la labor ha sido a pulso. Escogió ese camino, asegura, porque "mi idea es mostrar que se puede hacer algo con pocos recursos, con buena gente, buenos amigos y talento".
Ya que no postuló a ningún fondo concursable, el apoyo de los habitantes de la zona ha sido fundamental. Por eso, no duda en que los quienes lo acompañaron seguirán ahí, y quizás, junto a alguna incorporación estelar. "Me gustaría trabajar algún día con Héctor Noguera, y ya a nivel internacional, con Michelle Pfeiffer", comenta. Quizás lo logre, al menos por intentos, Héctor no se queda.