Tendido eléctrico porteño
Ya es hora que el agitado debate por el soterramiento eléctrico sugerido para la capital también se traslade a Valparaíso. En medio de estos inusuales días de sol en pleno invierno, decidí llevar a un amigo foráneo a conocer Playa Ancha como una alternativa a los habituales recorridos turísticos por la ciudad. Ahí estábamos, encaramados subiendo por Quebrada Verde con un helado York en la mano, cuando la imponente vista obligó a detener el recorrido para registrar la panorámica costera con una foto. Errando sin saber, insistí que llegáramos hasta el mirador Marina Mercante para consagrar la postal. Apenas alcanzamos la cumbre, rápidamente nos apostamos en la baranda para observar el paisaje y poder tomar la anhelada fotografía. Sin embargo, grande fue la sorpresa al descubrir que un par de postes y numerosos cables obstruían la vista, echando por tierra nuestras intenciones y desacreditando, de paso, mis ínfulas de anfitrión.
Además de la contaminación visual, la saturación del tendido eléctrico también conlleva numerosas consecuencias para Valparaíso. Probablemente, menos motosierras y más árboles existirían si los porteños contáramos con un cableado eléctrico subterráneo que, con su diseño, permitiera también que importantes esfuerzos, como la remodelación de este mirador, no quedaran relegados a un segundo plano producto de la falta de planificación.
La DC y el Tte. Bello
Convengamos que, a partir de lo ocurrido el sábado con la Democracia Cristiana y su pacto parlamentario con el MÁS, la IC y el PRO bien vale consignar que hasta el Teniente Bello está menos perdido que la otrora falange, hoy reconvertida en partido con domicilio político en la izquierda.
Agradece
Aunque aún no está terminada, quiero agradecer públicamente al municipio de Viña del Mar el mejoramiento en la iluminación de la Plaza de Forestal, que desde la semana pasada luce las nuevas luminarias que confiamos, permitirán devolver la seguridad a los vecinos de este populoso sector.
Ignacio Milies
Rodrigo Durán
M.Ll.M.