Muelles y grúas con daños en las caletas
Pescadores están preocupados por deterioros a la infraestructura de Portales y El Membrillo. Dicen que las marejadas anormales "volverán".
Ordenando la casa estaban desde temprano los pescadores de las caletas porteñas: Portales y El Membrillo. Y es que tras el paso del frente de mal tiempo de condiciones extremas que azotó a la región; con lluvia, viento y marejadas anormales, el clima dio tregua y el sol brilló con intensidad para dejar en evidencia los daños que dejó el impetuoso mar.
"Tenemos problemas estructurales que se sumaron con cada evento de marejadas. Pero lo que más nos aproblema en estos momentos, es aquí, en el corazón de la caleta", dijo Manuel Pérez, presidente del Sindicato de Pescadores de Caleta Portales, cuando señaló la grúa hidráulica que se ubica al final del muelle.
"Sin ésta grúa nosotros no podemos bajar lo botes a la mar, ni subirlos de regreso después de la pesca. El mar llegó a sobrepasar la grúa. La mojó entera, todo su sistema eléctrico y del motor", lamentó el pescador mientras otros compañeros intentan reparar el problema.
"marejadas normales"
Quién más que la gente mar conoce lo que la fuerza de las olas es capaz de hacer. Bajo ese punto de vista, el presidente de los pescadores de Portales opinó que: "nosotros como hombres de mar lo prevemos. Y si no tenemos más pérdidas es porque sacamos los botes a tiempo. Pero éstas marejadas anormales serán normales. Yo creo que esto se va a repetir año tras año, y lo que se necesita es una nueva planificación para las obras e infraestructura de las caletas".
Cabe recordar que con los temporales y marejadas anteriores se destruyeron los puestos de los limpiadores de pescado de Portales. Por lo que ahora fueron modificados y tienen una modalidad en la que pueden ser levantados con la grúa horquilla de los pescadores, y así los limpiadores dejan sus puestos fuera del alcance de las olas. Pero así y todo hubo algunos que resultaron dañados.
Muelle del membrillo
La misma sensación de inseguridad tienen en Caleta El Membrillo, donde el mar levantó parte del muelle.
"Nuestro muelle sufrió varios daños. Se salieron todos los peldaños de la escalera, también la parrilla completa. Pero lo más grave es la parrilla de arriba, por donde sacamos los carros. Imagínese que es una tremenda estructura de fierro y el mar lo dobló. Por eso nosotros llamamos a la Dirección de Obras Portuarias (DOP) y ellos vendrán a revisar el problema", señaló René Parada, tesorero del Sindicato de Pescadores de Caleta El Membrillo.
La alerta de los pescadores se debe a que con sus muelles en malas condiciones ellos no pueden trabajar.
"Nosotros sacamos plata de nuestro bolsillo para costear las reparaciones momentáneas y así al menos podemos trabajar. Pero aquí se necesita una obra de mayor envergadura y nosotros no tenemos cómo pagarla", agregó Parada.
Los pescadores del Membrillo aseguraron que su caleta es un embudo para el mar, donde las olas revientan con toda la fuerza de la naturaleza. Para ellos las marejadas que vinieron para quedarse, y son una señal de que se necesita una nueva forma de planificar las obras e infraestructura portuaria, sobre todo en las caletas pequeñas como Horcón, que resultaron aún más afectadas.