Manuel Gómez Poblete
Si bien, es el propio entrenador de Everton, Pablo Sánchez, quien reconoce que sus jugadores están difrutando de su auspicioso presente futbolístico -ya bien alejados del fantasma del descenso y a tan sólo dos puntos del líder, Deportes Iquique- "Vitamina" también asume que como técnico, tiene la misión y obligación de pensar y planificar a futuro, lo que también, en cierto modo, lo inquieta.
"A mi me cuesta un poco más (el tema de disfrutar con un equipo), ya que apenas terminado un partido, ya piensas en el otro y hay que empezar a diagramar los entrenamientos, tenemos que abarcar más cosas. Esto no quiere decir que no esté feliz, ya que si lo estoy y disfruto, obvio. Pero también tengo puesta la cabeza en todo lo que viene y todo lo que falta. El fútbol es tan dinámico que ya tenemos que ir pensando en la próxima pretemporada y los próximos refuerzos, sabiendo que hay una serie de jugadores que terminan ahora. Se nos va a terminar el contrato de muchos jugadores el 21 de mayo, cuando termina el torneo... y nueve días después tenemos que estar jugando la Copa Sudamericana con algunos jugadores a los cuales tendremos que hacerles un anexo de contrato. Hay que tener en cuenta de que si nos toca pasar de fase, de todas las incorporaciones que se hagan, que pueden ser todas las que queramos, sólo podemos incorporar tres a la Copa Sudamericana... es todo muy complejo. Incluso, el sorteo de la siguiente fase de la Sudamericana será el 5 ó 6 de junio y recién ahí sabremos si se juega el 25 de junio o el 12 de julio. Ahora, si nos toca el 25, tendremos que empezar a entrenar el 10 de junio para por lo menos tener dos semanas de trabajo, pero jugás ese primer partido y después te toca el otro el 28 de julio, o sea, casi 35 días después... es todo una locura y hay que estar con la cabeza en demasiados lugares. Pero bueno, es nuestra profesión, nos gusta, la elegimos, es desgastante, pero esperamos seguir disfrutándola".
El BALANCE, POSITIVO
Con 12 puntos de ventaja en relación al actual colista y principal candidato a perder la categoría como lo es Cobresal (32 contra 20 unidades en la tabla acumulada) y aún en la lucha por el título del torneo de Clausura -algo insospechado hace unos meses, tomando en cuenta que hace menos de un año, el Everton (de Héctor Tapia en ese entonces) luchaba por retornar al fútbol grande de la Primera División, el técnico Sánchez reconoce y valora que el ambiente en el interior del plantel viñamarino, es total y absolutamente positivo.
"Más allá de lo sucedido ante Iquique, aún dependemos de nosotros para seguir en carrera. A lo mejor no para hacernos de la punta, ya que dependemos de lo que hagan otros equipos, pero de todos modos lo vamos a seguir intentando. Nos hemos dado cuenta de que somos competitivos, llevamos nueve fechas invictos, tenemos la valla menos batida y ese es un lujo que no se pueden dar muchos. Este grupo se ha dado cuenta que sí se puede ser feliz jugando a un deporte de alta presión y de mucha tensión. Hoy los jugadores están disfrutando de este momento y yo lo percibo y no solamente en sus caras, sino en la manera en que juegan".
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