Una población estimada de 75 mil personas pertenecientes a los grupos de riesgo que puedan contraer el virus de la influenza, se tiene considerado vacunar en Viña del Mar para prevenir esta enfermedad.

Así lo manifestó la alcaldesa Virginia Reginato, quien acompañada del director del Área de Salud de la Corporación Municipal, Georg Hübner, iniciaron en el Cesfam de Miraflores la campaña de vacunación contra la Influenza, que se extenderá por los próximos dos meses.

En la oportunidad, la jefa comunal hizo un llamado a la comunidad a asistir a los Centros de Salud Primaria de la comuna para colocarse esta vacuna de manera gratuita y sin inscripción previa.

"El objetivo de vacunarse es prevenir y por eso quiero hacer un llamado a los viñamarinos, especialmente de los grupos de riesgo como embarazadas, niños, adultos mayores o personas con algún tipo de enfermedad crónica que asistan a los Cesfam o lugares habilitados para vacunarse contra la influenza lo más luego posible", dijo la alcaldesa.

Entre globos blancos y aplausos despidieron en las afueras de la Escuela Alemana de Valparaíso al pequeño de cuatro años que perdió la vida el pasado miércoles, cuando la bicicleta en la que iba junto a su madre se estrelló en el muro de una bajada en el cerro El Litre.

La carroza fúnebre pasó frente al recinto alrededor del mediodía de este viernes, momento en que alumnos, profesores, funcionarios y apoderados despidieron por última vez al niño, quien había ingresado a la escuela apenas este año.

"A pesar de que él viene de un jardín infantil, en donde estuvo sus primeros años, sigue siendo nuestro alumno y la comunidad escolar lo recuerda como tal", declara Hernán Saavedra, director de la Escuela Alemania.

Hernán cuenta que la idea de despedir al pequeño surgió del mismo establecimiento educacional. "Pensamos mucho en cómo rendirle homenaje a un niño que por primera vez ingresaba a la Escuela Alemania, y que se encuentra con esta tragedia familiar que no es menor", agrega el director del recinto, quien destaca que finalmente se solicitó a la familia que el cortejo pasara frente a la escuela, por avenida Argentina.

Priscilla Barrera Ll.

Con una micro volcada en el patio de sus casas despertaron ayer dos familias de la calle Las Orquídeas en la parada 8 de Achupallas, luego que el conductor de la máquina de pasajeros, que manejaba en estado de ebriedad, perdiera durante la noche anterior el control del vehículo cuando se dirigía sin ocupantes a su casa ubicada a pocos metros del lugar.

El hecho ocurrió pasadas las 23 horas de este jueves, cuando S.A.P.V. de 46 años, conducía la máquina de pasajeros en completo estado de ebriedad.

Al llegar a la primera intersección en la parte alta de calle Las Orquídeas, el conductor habría chocado contra el cerro, perdiendo el control de la máquina que terminó volcada en el patio de dos propiedades, arrasando a su paso con rejas, muros, vigas y techos.

En el patio

Así lo relató ayer aún impactado con lo ocurrido Alex Álvarez, uno de los 5 ocupantes de una de las viviendas afectadas, quien recordó que sintieron un estruendo ensordecedor, pero que nunca imaginaron ver una micro en su patio.

"Ya estábamos durmiendo cada uno en su pieza cuando sentimos un ruido espantoso y salimos a ver y nos encontramos con la sorpresa de tener un microbús en nuestra casal, el portón totalmente destrozado (...) Cuando salimos afortunadamente habían llegado algunos vecinos y lograron retener al chofer que se estaba arrancando porque no se podía mantener en pie de lo borracho que estaba", detalló el afectado que ayer, al igual que su vecina esperaba el retiro de la máquina para evaluar los daños reales sufridos en las propiedades.

Natalia Corona, propietaria de la otra casa afectada, no se encontraba en su casa cuando ocurrió este accidente.

"Gracias a Dios que esto fue de noche porque mi hija y la hija de mi vecina, juegan siempre acá. Si no hubiese sido una tragedia (...) Es impactante ver cómo quedó la micro", comentó la joven.

Lo que más indigna a los afectados y a sus vecinos, es que el responsable de este accidente manejaba un vehículo de pasajeros en completo estado de ebriedad.

"Supimos que marcó 2.29 su alcoholemia. Nadie se nos ha acercado, vino un representante de la línea 406 pero ni siquiera se acercó a preguntar cómo estábamos. Alguien tendrá que responder por los daños", precisó Alex.

Afligido y sin muchas ganas de hablar, el propietario de la máquina gestionaba con una grúa para poder retirar la máquina de pasajeros.

"Lo único que sé es que me cobran 600 mil pesos por retirar la micro. La máquina no trabajó ayer porque estaba en mantención (...) Los choferes son un cacho, no me ha dado la cara...no sé qué voy a hacer", dijo angustiado Miguel Angel Lever.