Nicole Valverde S.

Carolina González ha vivido toda su vida en el cerro Los Placeres -justo en el medio- a la altura de la Villa Japón. Es por eso que cuando era escolar vivió en carne propia lo que es tomar locomoción en las mañanas.

A esa altura del cerro (Villa Italia, Villa Japón, Villa Berlín y más arriba en la Población El Progreso) las micros ya vienen llenas de pasajeros que habitan en la parte alta. Y a pesar de que los buses pasan con bastante frecuencia, simplemente pasan de largo y dejan a la gente botada a la suerte de que la siguiente micro pare y los lleve a destino.

A las 7:30 horas de la mañana del viernes, Carolina, quien ya es una mujer adulta, estaba con su hijo menor esperando la micro para ir a dejarlo al colegio, y contó a La Estrella que con el paso del tiempo el problema de la locomoción ha empeorado considerablemente en las mañanas.

"Comienza marzo y esto es algo de todos los días. Todos los días lo mismo. Las micros bajan llenas. Nosotros hemos estado acá mínimo entre 15 a 20 minutos y quizás en cuánto rato más vamos a poder subirnos a una micro".

Y agrega: "Yo no sé si esto pasa en los otros cerros, pero tengo la impresión que sí. Y creo que es porque arriba ha llegado mucha población, y acá con las torres que están construyendo va a ser peor. Ahí sí que va a costar tomar locomoción, porque toda la mitad del cerro para abajo queda botado. Por eso, cuando comienzas a atrasarte, uno piensa en tomar colectivo, pero es lo mismo, también bajan todos llenos. A veces de milagro cuando suben vacíos se dan la vuelta acá y uno aprovecha de subirse".

Estudiantes

Quienes también sufren son las y los estudiantes placerinos, ya que muchos estudian en el plan o en otros cerros. Aunque la mayoría de los escolares acude a las escuelas básicas que se ubican en el mismo cerro, es por eso que la Línea 501 y 510 cuenta con tres buses sólo para trasladar escolares. Lo que también se replica en otras Viña-Playa Ancha.

Benja vive en Villa Berlín, pero estudia en Barón. Entra antes de las 8 de la mañana, pero para llegar a la hora tiene que salir de su casa una hora antes. Y asegura que a veces las micros no vienen tan llenas desde arriba, pero aún así no paran. Incluso ha sido testigo de vecinos que pierden la paciencia y se paran casi al medio de Av. Matta para que la micro les frene, lo cual es algo muy arriesgado.

Pasa en todos lados

Pero el caso de Placeres es sólo para graficar lo que ocurre en casi todos los cerros de Valparaíso debido al imparable crecimiento demográfico. Lo mismo ocurre en Curauma y Placilla. Al igual que se repite en los sectores altos de Viña del Mar.

Del plan al cerro

Similar caos es el que se arma para volver a casa a la hora punta de la tarde, a eso de las 18 horas en adelante.

Los paraderos ubicados desde Plaza Aníbal Pinto, pasando por Pedro Montt hasta Plaza O'Higgins están colapsados de gente. Tanto así que forman filas de micros y colectivos que se adelantan entre sí impidiendo que la gente alcance a tomar la locomoción hacia su casa.

Algunas personas incluso se paran en la calle por un asiento en el colectivo, arriesgándose a ser atropellados.

A esa misma hora tomar colectivos en Salvador Donoso es un infierno o casi una hazaña. Ni los usuarios ni los conductores respetan el paradero establecido. Y comienza una batalla de adelantar filas que muchas veces terminan en Huito, o incluso en Edwards. Y el día viernes es el peor de toda la semana. Aunque es comprensible que todos quieren llegar lo más pronto a su hogar.

¿falta locomoción?

Hay quienes piensan que la solución sería aumentar el número de microbuses y colectivos. Pero según el seremi de Transportes, Mauricio Candia, eso sólo se justifica en algunos casos. "Pero en cambio en este caso ocurre que la hora punta es muy fuerte y durante todo el resto del día los buses andan vacíos. Por lo tanto hay que optimizar flota más que aumentar buses. Eso significa mejorar la frecuencia más que comprar nuevos buses, y llenar las calles con micros que pasen cada 30 segundos por la puerta de mí casa".

Por otro lado, la autoridad regional de Transportes reconoce que existe un monitoreo con respecto a los servicios del Transporte Público, sean buses o taxis colectivos en la Provincia de Valparaíso. Y que efectivamente existe una sobrecarga de parte de los servicios producto del aumento de la demanda de la comunidad por el ingreso de estudiantes al colegio, y el inicio de las actividades laborales.

¿hay solución?

Candia asegura que se están implementando medidas; como incorporar buses ascensores, y apoyar el flujo con buses de inyección en los horarios punta.

Aunque en la hora punta de la mañana -en la bajada de un cerro- los servicios logran cubrir bastante bien las cuotas superiores del cerro. Pero ya a mitad de cerro el bus va lleno, y por lo tanto la comunidad queda sin posibilidad de poder subirse al interior de un bus.

"En ese sentido, estamos trabajando con las juntas de vecinos y obteniendo diversa información al respecto a través de las observaciones o reclamos por parte de la comunidad. Y en muchos cerros ya se han implementado buses de inyección que funcionan a mitad de cerro en las horas punta, de 7 a 8 de la mañana y de 8 a 9 de la mañana. También se refuerzan las frecuencias y eso permite sacar a todo el público de determinados sectores".