Un empate que dejó con gusto a poco a los goleadores del Clásico Porteño
Raúl Becerra y Mario Parra hubiesen preferido no marcar... pero ganar.
Manuel Gómez P. Guillermo Avila N.
En un clásico que arrojó un consenso en relación a que hubo un tiempo para cada uno -y que el 2 a 2 entre Everton y Wanderers fue, en definitiva, lo más justo- dos de sus protagonistas en las redes, Raúl Becerra y Mario Parra, coincidieron en el gusto final del partido no fue del todo agradable, tal como uno y otro lo pretendía.
El evertoniano Raúl Becerra (autor de los dos tantos locales), salió "mosqueado" por el empate final. "Para nadie el lindo empatar en casa y mas por como se nos dio el partido en donde nos fuimos al descanso con una ventaja de dos goles. Teníamos todo a favor pero lamentablemente en el segundo tiempo no entramos como lo esperábamos y con la concentración que requería el partido. Y por ahí dos situaciones nos ponen en empate y es por ello que nos vamos con bronca. Tuve la suerte de marcar dos veces, pero para mi, la mayor alegría pasaba por ganar".
Por la vereda de al frente, en tanto, el central Mario Parra -que había sido castigado por tres fechas tras tapar precisamente la insignia de Everton, en un homenaje al Chapecoense- indicó "lo del castigo es un tema cerrado para mí. Ahora, gracias a Dios y lo lindo del fútbol, que justo me toca volver y marcar un golazo ante Everton, pero si me preguntan... hubiese preferido ganar a marcar. Pero al final se dio así, logramos remontar y nos llevamos un punto que en el primer tiempo no se veía por donde".
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