Entrenamiento wanderino acogió a damnificados del incendio porteño
Estadio Elías Figueroa abrió sus puertas para actividad recreativa dirigida a niños albergados.
Con el inicio de los entrenamientos de Santiago Wanderers correspondientes a su pretemporada 2017, el equipo caturro quiso prestar ayuda a los damnificados del incendio ocurrido el pasado lunes en Valparaíso; donde cientos de personas perdieron sus hogares, llegando incluso a quedarse con lo puro puesto.
Al estadio Elías Figueroa llegaron varios niños que se encuentran en el albergue ubicado en Playa Ancha (Polideportivo Renato Raggio), a pasar un rato agradable con los jugadores wanderinos, instancia en que pudieron reír y distraerse por un momento de la tragedia vivida.
En el lugar, los pequeños pudieron lanzar penales a los arqueros del equipo y cada uno recibió una pelota de regalo de parte del equipo porteño.
Felipe Sepúlveda, jefe de Marketing del club, destacó que "Wanderers siempre va a estar cuando pase algo así, obviamente los chilenos tenemos solidaridad cuando ocurren estas cosas y en nuestra casa que es Valparaíso, en representación de Santiago Wanderers tenemos que estar".
El funcionario caturro comentó que en este minuto también se encuentran brindando ayuda en la sede social de la institución y en la futura tienda ubicada al interior de la Estación Puerto, habilitando ambos lugares como centro de acopio para los damnificados.
En el curso de la actividad recreativa que brindó el equipo caturro, el jefe de marketing de Wanderers, indicó que esperan que el pequeño regalo que se les entregó a los niños pueda ser ocupado no solamente en estos momento, si no que en el resto de los días que les quedan de esta situación tan complicada que están viviendo.
Tras los minutos de diversión que recibieron los pequeños hinchas, Sepúlveda manifestó que "creo que el 'adn' porteño tiende a sobreponerse a estas situaciones. Valparaíso tiene incendios desde el momento que nació, los mapuches lo bautizaron como Alimapu (tierra quemada), entonces efectivamente algo que tiene el 'adn' porteño es sobreponerse a las dificultades, y no tengo duda que la ciudad lo va a hacer".
Perdió todo
Al estadio caturro llegó Carlos Bernales de 62 años, hincha de toda su vida de S. Wanderers, que perdió el lugar donde vivía producto del incendio.
Cerca del sector "La Copa" de Playa Ancha se encontraba el hogar que habitaba Bernales, del cual no quedó nada producto de las inmensas llamas y del viento que había en el sector el pasado lunes.
"La semana anterior murió mi señora y esta semana se quemó la casa, ahora estoy aquí albergado y esperando", relató el esforzado hincha, que se encuentra en el albergue ubicado en el polideportivo Renato Raggio.
Gracias a la actividad impulsada por el plantel wanderino, Carlos Bernales indicó que se encontraba un poco más alegre. Es que tuvo la posibilidad de ver el entrenamiento y evitar pasar encerrado todo el día en el albergue.
De las cosas que pudo salvar, confesó que solo rescató su gorro y la camiseta del equipo que tanto ama. "Nací wanderino y voy a morir wanderino, porque yo soy porteño", destacó.
Con fe, el playanchino señaló que "no hay que echarse a morir, pues dicen que después de una mala, viene una buena".