Buscan a perrita que se hizo humo en bus que venía de Santiago a Quilpué
"Mandy" viajaba en la litera del bus en su canil. A la llegada, la jaula estaba abierta y sin la perrita.
Devastados están Cristián Flores y su pareja Andrés por la desaparición de "Mandy", una perrita Daschund de apenas cinco meses que viajaba con ellos desde Santiago a Quilpué en la litera de un Pullman Bus y que no llegó a destino con sus amos.
Según relató Cristián, el viaje se inició el sábado a las 14.15 desde el terminal Metro Alameda para llegar a la Ciudad del Sol a las 16.15 horas a bordo del bus 329.
Como era habitual, "Mandy" viajaba en su canil y en la litera del bus para evitar ir en el compartimento del equipaje encerrada. Viajaba en su canil cerrado, con correa y, en esta oportunidad, con la ventana de la litera un tanto abierta para la ventilación.
"El bus hizo la parada de rigor en Pajaritos y después hizo tres paradas más para subir a un inspector, a una vendedora de dulces y a un pasajero. Después se detuvo en el pesaje y ahí estuvimos un rato más prolongado detenidos, de ahí se vino a Quilpué, paró en Los Pinos y llegamos al terminal", señaló Cristian Flores.
Canil abierto
La pareja procuró sentarse cerca del lugar donde estaba la cachorrita para escucharla y tras media hora de ladridos, "Mandy" se calló . "Se cansó y se durmió", pensaron.
"Descendimos del bus y nos dirigimos a la litera. Con nosotros se baja el chofer que se supone que es el único que tiene llaves de ese lugar, abre el compartimento y nos encontramos con que está el canil abierto, pero no estaba la perra. La buscamos, la llamamos y no estaba", relató.
De ahí comenzó la angustia y los reclamos y decidieron abandonar el terminal solos, con sus bolsos y sin su compañera. Sin "Mandy" que comparte cama con ellos cada noche.
"Fuimos a la boletería, pero el niño poco y nada podía hacer. Queremos pensar que mala intención no hubo, que no intervinieron los auxiliares", señaló.
El canil tiene una malla en su parte delantera que se sujeta con cuatro pestillos, uno en cada esquina y que se saca completamente. Lo extraño, señala el afectado es que la malla estaba dentro del canil, y no fuera.
"Si la perra se arranca sola y pudo abrir el canil, lo abre hacia afuera porque empuja, pero un perro no puede jalar la reja hacia adentro. Eso es muy raro, igual creemos que hay mano negra o que en una de las paradas alguien la sacó por la ventana", señaló.
Hicieron una denuncia y paralelamente la pareja ha solicitado ayuda a través de las redes sociales para poder recuperar a su perrita. Creen que puede estar en Curacaví o sus alrededores considerando el tiempo que dejaron de oírla y hacen un llamado a que la devuelvan o que avisen si la están vendiendo.
5 meses tiene la cachorrita que desapareció del bus en que viajaba el sábado.