Contadora auditora se quedó con la corona de la Cumbre Guachaca 2016
Ninoska Guzmán nació en Viña, vivió en Playa Ancha, Conce, Punta Arenas y, desde los 10 años, en Quilllota.
Llegó acompañada de su familia y amigos. Había que celebrar y así no más fue. Ninoska Guzmán, de 24 años y contadora auditor de profesión, se transformó en la Reina de la Cumbre Guachaca de Quillota 2016 y fue coronada por Adolfo "Moncho" Lazcano, compipa mayor; Daniela Rodríguez, la soberana 2015; y Marcela Küpfer, directora de La Estrella, diario que lideró el concurso con sus ediciones regional y de las provincias de Quillota y Petorca.
La joven oriunda de Viña del Mar, pero que vive desde los 10 años en Quillota, llegó acompañada de toda su familia y, como dicta la tradición, participó de una serie de actividades durante la jornada junto a Javiera Santelices y Alejandra Mendoza, quienes resultaron en segundo y tercer lugar, respectivamente.
Comieron una cazuela con los integrantes de la comunidad guachaca de Quillota y luego participaron de la ya tradicional fotografía que inmortaliza a las candidatas empinando el codo con un terremoto.
Luego de eso vinieron las empanadas, sopaipillas y una visita por todos los locales de comida que tuvo el evento, al que llegaron cientos de personas en el ex El Edén.
La coronación
Poco después de la medianoche llegó el momento de la premiación, donde se sumó Daniela Rodríguez, quien entregó la corona a su sucesora. Antes de hacerlo, la Reina Guachaca 2015 contó sobre las actividades que realizó en su año de reinado. "Tuvimos muchas actividades, principalmente destacando y animando a la gente a practicar deportes, uno de los sellos que había anunciado. Cumplí y siempre seré una guachaca", dijo al micrófono, ganándose un aplauso de los asistentes.
Luego llegó la premiación. Tercer lugar para Alejandra Mendoza, segundo para Javiera Santelices y primero para Ninoska Guzmán. En el resultado, conteo se realizó la tarde del sábado, Alejandra logró el 16,3% de los votos, Javiera el 31,7% y Ninoska el 52%.
La reina se llevó banda, corona, gift card y un regalo de La Estrella. Antonio Olivares y señora, como es tradición, también premiaron a la reina y acompañante con un fin de semana en la posada Don Eduar en Maitencillo, en la comuna de Puchuncaví.
Luego de eso, la reina bailó la tradicional cueca junto a Adolfo "Moncho" Lazcano. Posteriormente se sumaron el segundo y tercer lugar, y luego la fiesta siguió.
Contenta
Ninoska estaba feliz. En la mesa había parte de su familia y hasta su jefe que llegó a presenciar el momento. Llegó radiante y los nervios los dejó en la casa. Sonó la cueca y bailó. "Hice lo que pude, no soy profesional, pero bailo", dijo la joven de 24 años.
La profesional nació en Viña, vivió en Playa Ancha, también en Punta Arenas, Concepción y, desde los 10 años, en Quillota, donde está instalada.
Quiere seguir estudiando para perfeccionarse y tiene como hobbie el Kung Fu, una variante de las artes marciales, el que practica hace un tiempo.
La cumbre
La fiesta tuvo, como es de costumbre, empanadas, anticuchos, choripanes y sopaipillas con pebre bien cuchareao'. Para beber hubo vinos, terremotos y "uno que otro whisky para los cuicos", como lo adelantó Adolfo "Moncho" Lazcano, compipa mayor de la fiesta.
Los encargados de la cumbia clásica fueron los músicos de Sonora Producción, que hicieron bailar a todos en la fiesta. Las cuecas choras llegaron con las composiciones de Los Paltones de la Cueca, quienes no sólo interpretaron cuecas, sino que también se transformaron en los regalones de la noche con sus sayas, y otros ritmos nacionales.
La sorpresa de la jornada fue La Tintolea de Fulanito, una agrupación que con su pachanga fue el deleite de grandes y también los más lolos. "Ya comenzamos a trabajar en la Cumbre Guachaca del Tricentenario de Quillota y la 15 de nuestra historia", dijo Lazcano al cerrar la fiesta.