De los autoadhesivos a las "micros discotequeras"
Luces, pantallas planas, cortinas color neón y música prendida, son algunos de los elementos que convierten a los buses en verdaderas fiestas andantes. Aquí sus precursores explican de qué trata y Transportes lo que dicta la ley.
Si usted es de los usuarios que por años ha frecuentado las micros que circulan por el Gran Valparaíso, es muy probable que en más de una oportunidad se haya puesto a leer los autoadhesivos que los choferes han pegado a su alrededor. Algunos de éstos eran: "Papito, no corras. Te esperamos en casa", "Si va atrasado no es mi culpa, los aviones vuelan", "Sonría, lo estamos filmando", o, "Johnny Herrera es mi copiloto". Así también, el clásico que con letras borrosas decía: "La falta de sexo puede provocar problemas a la visión".
Ahora bien, si su memoria no falla y se remonta al año 2000, cuando existía la Flota Rauter (hoy Sol y Mar), es muy posible que piense en esa micro que hacía el recorrido "Gumercindo - Puerto" (actualmente 304) y que en los costados de las puertas, con plumón permanente indicaba: "No sea cavernícola y toque el timbre". Dicen que iba dedicado a los estudiantes de Quilpué y Villa Alemana, pero a los que más les llegaba, era a las personas que los miércoles y sábados iban a la feria de El Belloto y no tenían las manos desocupadas para tocarlo. Entonces, para molestia del conductor, gritaban: "¡Me para en la esquinita, por favor!".
Pues bien, si recuerda todo esto y más, le contamos que esta moda que también ha llevado los nombres de hijos o de romances en pegatinas, poco a poco se ha ido quedando atrás, porque lo que ahora la lleva, son las "micros discotequeras". Es decir, las máquinas que llevan luces, cortinas color reflectante y pantallas planas en su interior, entre otros.
Uno de los precursores de esta idea ha sido Pablo Quiroz, un quilpueíno que administra los dos buses de su padre y que se ha hecho conocido en la región por su concepto de "Turismo Party On the Bus". Como él mismo señala, la idea surgió alrededor del 2013, pero comenzó a cobrar más fuerza en 2014, cuando decidió tener más contacto con la gente a través de las redes sociales.
"La idea nace primero para transportar a la gente después del carrete de una manera más entretenida y poder realizar lo que hacemos hoy en día: generar una empresa donde puedan contratarnos para diversos tipos de eventos como trasladar gente desde la universidad a los carretes o a una persona que quiere llegar salva a su casa después de celebrar un cumpleaños. Nos puede llamar y tenemos traslado en micros o van, todas diseñadas entretenidas para que la pasen bien", apunta.
Robotizadas
En efecto, las micros de Pablo son la 114 que se dirige a Las Vegas y la 101 que va hacia Belloto Norte. Ambas, junto a la van que también ofrece para servicios especiales, están totalmente "enchuladas" con elementos de entretención.
"Para una micro compramos las pantallas en la fábrica y para la otra, nosotros las arreglamos y las instalamos. El color de las cortinas es para producir el efecto con las luces y ahora, en este momento, estamos trabajando con Eduardo Durán, uno de los dueños de las empresas de iluminación más grandes que hay en el país y que estuvo encargado de la iluminación del Lollapalooza. Con él vamos a hacer una instalación led completa que es robotizada y que puede pasar publicidad por intermedio de la iluminación", declara.
Pero las pantallas, que muestran videos musicales especialmente de electrónica y reggaetón, pronto serán reemplazadas por otro sistema más moderno. "Más adelante queremos eliminarlas para poner unos paneles led", indica Quiroz.
Para el joven, el objetivo es hacerle más ameno el viaje a sus usuarios, como también, que se entusiasmen para que lo contraten para eventos más masivos. "Cuando la gente se sube a las máquinas inmediatamente les llama la atención porque al enfrentarse al conductor tienen otra perspectiva con una puerta de vidrio que es similar a los buses que van a Santiago. Muchas personas nos han dicho 'qué linda la máquina, ojalá no la rompan' y con eso nos damos cuenta que hay preocupación. Entre más cuidada la tengamos, menos la rayan y eso uno lo agradece porque hoy la locomoción colectiva está súper mal mirada. Con esto mostramos que somos diferentes y la gente va a sus trabajos y estudios con energía", manifiesta.
"Las cromix Cab"
Claudio Araos, fundador del grupo Facebook "Las Cromix CAB", señala que esta tendencia de enchular micros se ha dado a nivel nacional desde el 2014. "El grupo se creó para las micros de la región pero se extendió a nivel nacional y en todas partes hay micros enchuladas, sobre todo en San Antonio", declara. Su compañero de staff, José Otarola, precisa que por línea hay unas 100 micros y que la mitad está intervenida como discoteque. "Unas mil micros a nivel regional están enchuladas como disco. Los choferes lo hacen porque les gusta y porque la gente aprecia una micro así. Aparte le da otro carácter a la locomoción porque se invierte harto tiempo y plata", comenta.
Los jóvenes, que además de ser coleccionistas de boletos y maquetas, se dedican a personalizar autoadhesivos para estas máquinas, sostienen que las micros enchuladas también tienen nombres. "La 'Bad Boy' es una de las más llamativas y conocidas. Es una Fenur que va de Peñablanca a Valparaíso y varios la ubican por su nombre. La otra es la 'Perversa', que es la 215 que va de Viña a Valpo", destaca Claudio. José, en tanto, apunta que otras micros han sido bautizadas con frases. "Por ejemplo, la 490 se llama 'De tu envidia nace mi fama' y la 602, de Concón, se burla del chofer que viene detrás haciendo alusión a la frase del Chavo del 8 que dice 'Es que no me tienen paciencia'. Es porque a veces andan lentos", señala entre risas.
Los busólogos, término que adaptan los aficionados a las micros y que no necesariamente conducen una, manifiestan que la característica esencial de las micros enchuladas son los colores y las luces. "Los elementos fundamentales de la micro enchulada son la cortina y cabecera flúor, la diablita y el ángel led y las luces led porque ahora eso es lo que se lleva, no los tubos fosforecentes de colores. También el escape libre, que es simular el sonido de las micros antiguas. La 115 de Belloto Sur tiene y le decimos 'La más ruidosa del Oeste' porque realmente lo es", asegura Otarola.
Seguridad
En cuanto a la seguridad de las micros, Pablo de "Turismo Party On The Bus", asegura que cumple con todo el reglamento que establece la ley. "Las máquinas cuentan con todo lo que rige la ley porque están asociadas a Fenur. Así que son fiscalizadas diariamente y cumplen con toda la normativa vigente. El único paralé por así decirlo, es el volumen de la música, pero la gente que maneja las máquinas tiene claro que si alguien reclama tienen que bajarlo ya que es un servicio de transporte público. Y si no les gusta la música, simplemente se apaga porque como dije, la idea es que el viaje sea más grato para la gente", recalcó.
En este sentido, los busólogos declararon que efectivamente hay música fuerte y que no siempre es del gusto de todos. "Siempre es cumbia, bachata o reggaetón, muy poco rock. Igual hay un rockero por ahí", señala Claudio. Sin embargo, José, explica que esa es la gracia. "El carrete no termina cuando la gente sale del pub, sino cuando se baja de la micro para irse a su casa porque arriba de la máquina la fiesta sigue con la música e incluso algunos bailan. Esa es la idea, divertirse y disfrutar del viaje. Toda la semana igual", cierra.