"Por siempre te amaré mi guerrero, mi vida, mi amor, mi amante, mi amigo y cómplice. No entiendo por qué te fuiste tan pronto, pero me quedo con lo mejor de ti". Con estas palabras Berta Castro, despidió en Facebook a Abdeel Castro Cea, el cabo 2° de la Escuela de Caballería de Quillota, que la madrugada del pasado domingo murió tras recibir un balazo en el tórax en el sector del Paseo Juan de Saavedra, al interior de Caleta Portales.

El asesinato de Castro Cea ha causado conmoción no sólo en la ciudad de Valparaíso donde ocurrió el crimen, sino que también en el destacamento de Quillota, al cual el joven de 28 años pertenecía al igual que su esposa.

Por lo mismo es que durante la jornada de ayer se informó a través de un comunicado de prensa que "este deplorable hecho ocurrido en la comuna de Valparaíso y que sería de carácter delictual, está siendo investigado por el Ministerio Público, mientras la unidad se encuentra junto a la familia del Clase fallecido y en particular a su esposa, prestando el apoyo correspondiente".

De esta manera se decretaron dos días de duelo en la institución ubicada en la zona interior de la Quinta Región.

Por otra parte, hasta el cierre de esta edición no habían novedades con respecto al paradero de los atacantes que terminaron a sangre fría con la muerte de Abdeel Castro Cea de 28 años.

Priscilla Barrera Ll.

Eran las 7.20 de la mañana de este lunes cuando Alejandra Rivera preparaba todo para salir a dejar a su hijo a la sala cuna y luego dirigirse a su trabajo.

Sentó al pequeño Matías de tan sólo un año y medio en su sillita y luego encendió el motor. Cuando se disponía a salir del estacionamiento de su casa y sólo había alcanzado a abrir unos pocos centímetros el portón, se acordó que había olvidado el chupete de su niño. Subió corriendo las escaleras hasta el segundo piso, tomó el chupete y cuando bajó se encontró de frente con la peor pesadilla: el auto y ni su hijo estaban en el garage.

Desesperada grito el nombre de su pequeño, regresó corriendo a su casa y le gritó a su padre que se habían llevado a Matías.

Sin poder creer lo que escuchaba, el padre de Alejandra sin pensarlo, tomó su camión y partió a recorrer las calles de Villa Alemana en busca de su nietecito.

Alejandra mientras tanto corría por las calles llamando a viva voz a su hijo. "Llegué a una esquina. En un paradero donde estaban las personas para tomar locomoción me dicen 'el auto se fue para allá rajado'. Regresé nuevamente y a la mitad de la calle, me desvanecí del schock, me toma una señora y justo para un caballero en un auto y me dice 'vamos acá están los carabineros cerca'. Me subí y llegué donde los carabineros", relató Alejandra luego de haber recuperado a su hijito sano y salvo.

La joven destacó la rapidez del procedimiento policial, el mismo que permitió activar a las dotaciones de todas las unidades de la Prefectura Marga Marga y buscar el automóvil con el niño.

"Darle las gracias a los carabineros, es una lección para todos, esto fue adentro de mi casa, eso es lo más insólito de todo", reflexionó Alejandra.

Darwin Plaza, padre del menor reconoció que él o los sujetos que robaron su auto vieron una oportunidad al ver el portón abierto y el motor encendido, pero que afortunadamente la presencia del niño o la dificultad para poder encender el motor del vehículo (cuenta con un chip) hicieron al o los ladrones desistir de su cometido.

"Encontraron el vehí-culo a 4 cuadras de nuestra casa", precisó Darwin quien manifestó que "uno nunca cree que esto le va a pasar".