La seremi de Salud, María Graciela Astudillo, explicó que existe el decreto supremo Nº 89 de 2004 de prevención de la Rabia en el hombre y en los animales, el cual establece que su margen de acción está dentro de lo que es el control epidemiológico de rabia animal y no respecto del manejo de la población canina. La autoridad sanitaria hace entonces un seguimiento de perros sospechosos de tener rabia, entre los que se cuentan los que muerden sin medir provocación, "sean domésticos o silvestres; los que mueren sin causa aparente y los que mueren con sintomatología nerviosa. El año 2015 se vigilaron 601 perros en la Región de Valparaíso y además se enviaron 178 muestras de murciélagos sospechosos de tener la enfermedad, 16 de ellos dieron positivo.