Lanzas arruinaron las vacaciones de argentinos robándoles todo su dinero
El hecho ocurrió en calle San Martín cuando apenas llevaban un día en Chile. "Queremos irnos", dijeron.
Un hombre que camina por la calle San Martín, casi llegando a la esquina de 14 Norte, le advierte a Martín Eugenio, turista argentino, que busque otra parte para estacionar su vehículo. "Carabineros está sacando partes, cámbiese de lugar", le comenta con discreción, pero el trasandino, bastante nervioso, le contesta: "¡Lo sé, pero me acaban de afanar!".
En efecto, el veraneante acaba de sufrir un robo. Según explica, con su señora se habían bajado por unos minutos a contemplar el borde costero, cuando una persona les advirtió que unos sujetos le habían roto el vidrio de su Peugeot para sustraer una cartera.
"Nosotros nos bajamos unos minutos para hacerle unas fotos a la playa, cuando de pronto una mujer nos avisa que nos están robando. Cuando nos acercamos a ver, ya era demasiado tarde porque se habían llevado la cartera de mi señora con todo", relata Martín, visiblemente afectado.
Dinero y documentos
Mientras el argentino cuenta su desgracia, personal de la Primera Comisaría viñamarina se acerca a prestarle ayuda. Sin embargo, la situación es mucho más complicada.
"En la cartera de mi señora iba todo el dinero que teníamos, tarjetas de crédito, los DNI y las tarjetas de migración para regresar a la Argentina. Lo único que nos quedó es el seguro del auto para que nos reparen el vidrio que nos quebraron y $1.000 en el bolsillo ¿Qué haremos ahora? ésta es una desgracia", se lamentó.
Marta Rusman, su señora, estaba al borde de las lágrimas sentada en el puesto de copiloto. "Nosotros veníamos de Buenos Aires, llegamos ayer (miércoles) y como nunca, dejé la cartera en el auto para andar más cómoda. Yo dije 'nos bajamos para una foto y listo', pero nunca imaginé que me pasaría esto. Yo con esta experiencia sólo quiero devolverme a mi país, me siento insegura y con mucho miedo", manifestó.
Luego que dejaron la constancia en Carabineros, se dirigieron a la Policía de Investigaciones para ver cómo podían regresar a su país, sin la tarjeta de migración.