David Donoso es un joven de 28 años que hace un año trabajaba como guardia de seguridad, hacía piruetas en su tabla de skate, practicaba malabarismo y llevaba una vida normal como cualquier persona de esfuerzo. Pero su historia tuvo un cambio rotundo.

Como siempre ha sido un chico sociable, David pasaba una tarde primaveral compartiendo con sus amigos en 'las ruinas'. Un sector aledaño a la ex Cárcel donde los jóvenes porteños suelen divertirse.

Todo iba bien con el malabarista, hasta que se hizo de noche y él se despidió del grupo porque tenía que alcanzar el último metro y así llegar a su trabajo de guardia en Quilpué.

Entonces, para no correr el riesgo de perder el metro y tener problemas con sus empleadores, David decidió cortar camino y tomar un atajo para llegar al plan lo más pronto posible. Pero esa decisión marcaría su vida para siempre.

Fue así que la oscuridad y la geografía del lugar, con escaleras que no llevan a ningún lado, murallas destruidas y frondosa maleza, le jugaron una mala pasada. El chico cayó al vacío desde un muro de ocho metros de altura. Y de pronto todo fue oscuridad y silencio.

DESPERTAR

Milagrosamente, David abrió sus ojos. El despertar no fue fácil para él, porque se dio cuenta de que se había accidentado gravemente, por eso estaba en el Hospital Carlos Van Buren.

"Desperté moviendo la pura cabeza, y fui diagnosticado con cuadriplejia, que es cuando uno no puede mover ninguna de las cuatro extremidades principales, brazos y piernas", recuerda David, a quien encontramos desayunando avena en el departamento de su hermana Estefany, ubicado en Avenida El Ocaso de Belloto Sur.

Y agrega: "Los médicos dijeron que tal vez iba a necesitar estar conectado a un respirador artificial. La caída fue grave, mire...", dice levantando su polera para mostrar la cicatriz que tiene en su espalda baja. Una gran marca de operación sobre su columna en forma vertical.

Como a las dos o tres de la mañana, David logró mover el brazo y después el otro. "Comencé a sentir aquí (apunta su cuello). Entonces su diagnóstico pasó a ser una tetraplejia", explica.

Luego de una semana, este joven quilpueíno, de espíritu fuerte y luchador, tuvo un gran avance en su estado. Aún así los médicos fueron lapidarios. "Me diagnosticaron paraplejia, una luxo fractura raquimedular nivel T10, 11, 12 y L1. Justo donde parten los rayos comunicacionales del sistema nervioso, por lo tanto ahí se produjo la pérdida del control de esfínter. Tengo que cambiarme unos catéteres según la ingesta de alimentos y líquidos. Y voy al baño cada cierto tiempo", confiesa.

SU PROPIO GIMNASIO

Para David, la ayuda y el apoyo de su familia y sus vecinos ha sido imprescindible para su rehabilitación.

Con ellos, habilitó y construyó un gimnasio en el balcón del departamento de su hermana, donde tiene los implementos que necesita para ejercitar su cuerpo y, algún día, cumplir el sueño de volver a caminar por su propia cuenta. Todo esto lo ha logrado con los fondos que reúne en sus eventos. Platos únicos en los que mucha gente de su comunidad le ha brindado cooperación desinteresada.

Hasta el gobernador de Marga Marga, Gianni Rivera, se ha cuadrado con ayuda. Constantemente desde la Gobernación le regalan productos y alimentos especiales para que la salud de David de mantenga fuerte.

"Un caso importante para nosotros es el caso de David, porque nos damos cuenta que muchas veces queda abandonado por la red de protección que tenemos y debemos ahí intervenir como Gobernación. Por eso hemos trabajado desde hace bastante tiempo con David y vamos a seguir haciéndolo. Además del aporte que le hemos hecho durante el tiempo anterior, ahora vamos a complementar la ayuda que va a necesitar él para la compra de la prótesis", indicó el gobernador Gianni Rivera.

SOÑADA PRÓTESIS

Y justamente es la prótesis articulada la que hoy le quita el sueño a David. Su idea es conseguir alrededor de 2 millones de pesos para poder costear una prótesis articulada permanente y una silla de rueda más liviana.

Pese a no contar con los recursos para costear una rehabilitación como corresponde para una lesión tan compleja como la suya, David está dispuesto a dejar la silla de rueda atrás y ponerse de pie nuevamente, para lo cual se fabricó con tubos de PVC de alta densidad y fierros una estructura que adosa a sus piernas y con la cual consigue caminar afirmado en un 'burrito'.

"De todas las puertas que he podido tocar, en todas me dicen que sí, pero en la realidad se ve muy poco. Tuve la oportunidad de conocer a gente de la Gobernación, formar un pequeño lazo de amistad y el día de hoy ya se cumplió parte de este proceso que tengo que pasar para llegar a volver a caminar. Se comprometieron con ayuda para el plato único del sábado pasado y me han ayudado bastante con lo que es el subsidio para la vivienda, y con el cateterismo", afirma David.

Respecto a esto, el gobernador Rivera se comprometió en hacer un aporte complementario para que David pueda alcanzar la prótesis. "Sabemos que es fundamental para que pueda caminar y pueda desarrollar su vida con normalidad junto a su familia", indicó el gobernador de Marga Marga.

ESPÍRITU DE SUPERACIÓN

Para poder comprar la prótesis permanente, David no ha dejado de trabajar. Demostrando permanentemente su espíritu de superación, el joven realiza malabarismo con balones de fútbol todos los fines de semana frente al Casino de Viña del Mar y en el centro de Quilpué, donde ya se ha hecho conocido por su habilidad y simpatía. La misma con la que se ganó el corazón de sus vecinos.

En tanto, el malabarista explicó que "busqué ayuda en la Teletón, pero me dijeron que por la edad que tengo era imposible entrar a rehabilitación. Entonces les pedí orientación y decidí rehabilitarme por mi propia cuenta. He estudiado todo sobre mi fractura de médula, he visto videos, y así fue como llegué hasta la prótesis permanente, porque yo sé y tengo la convicción de que voy a volver a caminar".

En abril de este año, David conoció a una kinesiólga y es ella quien lo ha estado orientando de manera desinteresada.

"Me dice los músculos que tengo que trabajar y cómo hacerlo. Porque yo de aquí para abajo estoy muerto, yo siento hasta aquí no más (dice mostrando su cintura). Pero a pesar de eso y de no tener vuelta atrás por mi lesión, soy muy inquieto y creo que voy a volver a caminar aunque sea a la fuerza", dice David, quien tiene claro que los únicos que pueden recetarle la prótesis es un médico fisiatra o un terapeuta ocupacional. Es por eso que ha acudido a los centros médicos públicos, pero que por su nivel de lesión le dijeron que era imposible volver a caminar.

TELETÓN

La jefa de gestión y voluntariado del Instituto Teletón de Valparaíso, Helena Araya, explicó que "nosotros atendemos a niños y niñas que tengan una patología congénita entre los cero y 20 años. Y después, atendemos a chicos con patologías adquiridas, por ejemplo lesionados medulares, hasta los 24 años, sin excepciones. Hay otros centros que se dedican a la rehabilitación de adultos y a bajo costo".

Quienes quieran ayudar a David, pueden depositar en su Cuenta Rut del Banco Estado número 16.968.550-9. J