Sería bueno quizás recordar que hace no mucho -en abril del año pasado- Everton perdió la categoría por... diferencia de goles con Unión La Calera. Aquello habla de la importancia de cada punto obtenido y de incluso los goles marcados y recibidos.

"Errores puntuales", como suelen decir los protagonistas del fútbol, terminan finalmente marcando diferencias, para bien y para mal. Y de errores puntuales, expulsiones tontas y goles en los últimos minutos, el Everton de Víctor Rivero sí que sabe.

Hagamos un repaso: Fecha inaugural del partido, Everton juega a gran nivel ante Magallanes, se pone incluso dos a cero arriba hasta que... Orellana se hace expulsar (entró en plancha a los 41') y tras ello vino la debacle oro y cielo, que incluyó una falla de Dalsasso en el último gol de Catalán y una expulsión regalada de Concistre casi al final del partido. Resultado: Magallanes vence por 3-2.

Tras ello -y otra vez en Maipú- Everton ganaba en forma cómoda a Santiago Morning por dos a cero, hasta que Gabriel Díaz comete un penal torpe (y además lo expulsaron) y luego, en los descuentos, un error compartido entre Suárez, Salinas y el meta González le permiten a Malán igualar a los 87': otros dos puntos perdidos. Luego vino el desastre ruletero ante La Serena en La Pampilla y ahora último, en Puerto Montt, otra vez se regalan puntos por desaplicaciones defensivas, primero tras la falla del juvenil Cisterna y luego con el penal de Alucema. Errores que para un equipo con pretensiones como Everton, bordean lo inaceptable. J