La primera pastelería canina está en Concón
En el local 4 del Centro Comercial "Paseo del Alto", en Concón, se acaba de inaugurar una pastelería canina que se llama "Wouf dela Crème". Sus dueños, Cristóbal Bravo y Rina Díaz, cuentan que apenas llevan 15 días funcionando, pero que la iniciativa ha sido tan bien recibida que ya tienen todo revolucionado el sector. "El pasado 31 de julio se me acabó el contrato de trabajo con un laboratorio y desde entonces quedé cesante. Y junto a mi pareja, que estaba en la misma condición, decidimos darle el vamos a este proyecto que le tenemos mucho cariño", dice Cristóbal, veterinario de profesión.
Rina, que es zoóloga, señala que la idea nació gracias a sus recuerdos como residente en el extranjero. "Viví por muchos años en Estados Unidos y ahí vi que existían estas pastelerías. Entonces quise hacer lo mismo acá en Chile, pero mucho más humanizado porque allá la atención es más fría. Así que aquí no sólo vendemos los alimentos para las mascotas, sino que también nos aprendemos sus nombres, sus historias y hasta cómo son sus personalidades", expresó.
En la pastelería se venden galletas, cupcakes (queques), jaleas y hasta tortas para los perros y gatos. Sus valores varían dependiendo los gramos y las peticiones. "Los precios van desde los $250 hasta los $15 mil con la torta temática que muchos compran para celebrarle el cumpleaños a su mascota. Pero también tenemos una alternativa más barata de $7 mil sin temática para que todos puedan disfrutar de nuestros productos elaborados por nosotros mismos", indicó Rina.
En este sentido, la pareja declara que por el momento lo que más se han llevado han sido las galletas de zanahoria, miel, pollo, manzana, mantequilla de maní y de atún para los cuchos. "El sistema de la pastelería es que el dueño pueda venir con su perro y escoja lo que se quiere servir. Así después se le pesan los gramos y dependiendo eso se le da el precio final y se lo lleva para su casa. Pero también damos la posibilidad de que la mascota pueda comer aquí mismo los alimentos porque se le van anotando y luego se le cobran", explicó Cristóbal.
Curiosos
Las gelatinas de carne también han sido la sensación de los primeros clientes que sólo han llegado a mirar por curiosidad. "Ha sido muy gracioso porque desde antes que nos instaláramos, la gente veía nuestro logo anunciando la pronta inauguración y muchos le preguntaban a los locatarios vecinos qué realmente éramos porque veían a un perro disfrazado de cocinero. Y cuando les decían que éramos una pastelería no lo podían creer hasta que vinieron y lo vieron por ellos mismos", relató el veterinario.
Mientras los dueños siguen hablando de su proyecto, tres nuevos clientes llegan a la pastelería. Se trata de Orco, Tana y Leya, tres canes llenos de energía que apenas ven las galletas se las quieren devorar todas. Sus amas, Verónica Bacigalupo y Catalina Muencke, llegaron al local gracias a una invitación de las redes sociales. "Vinimos por primera vez y nos gustó. Nos parece súper buena y entretenida la idea", manifestaron. Lo mismo dijo Sandra Medina, dueña de un hermoso golden retriever que se llama Ari. "Me encantó apenas supe de la existencia de este lugar y más a Ari, que es muy amistoso y sociable. Es un lugar muy bonito", destacó.
En este punto, Cristóbal comenta que hay personas que todavía no se convencen de que exista una pastelería de este tipo. "Muchas personas entran sólo para curiosear porque no se convencen de que haya una pastelería especialmente para mascotas. De hecho, cuando íbamos a sacar la patente comercial, dos funcionarias de la municipalidad vinieron a corroborar la información y nos preguntaron como tres veces si estaba bien escrito o no porque pensaban que se trataba de una peluquería y no una pastelería. Ahí les aclaramos que no, que era una pastelería y quedaron sorprendidas", afirmó.
Rina le tiene toda la fe a su negocio, porque asegura entender y captar lo que desean sus clientes. "No sólo es venir a comer o que los clientes se lleven los alimentos comerciales o accesorios para sus mascotas, sino que se creen vínculos para que sigan viniendo. Aquí por ejemplo hay un sillón en donde se pueden sentar con sus mascotas y contarnos sus historias. Nos gustan los animales y queremos transmitirle eso a la gente. Además nosotros mismos adornamos el lugar y creemos que es acogedor para todos", indicó.
El nombre
El nombre también ha llamado bastante la atención. Rina admite que se le ocurrió a su pareja y que le gustó. "Leyendo muchas cosas en internet di con la frase en francés 'La crème dela crème' que vendría a ser como 'lo mejor de lo mejor'. Y luego adapté la palabra en inglés 'woof' que es 'guau' en español. Entonces, para que la gente lo entendiera y pronunciara mejor, lo dejé así: "Wouf dela crème". Al principio no estaba muy convencido y dudábamos pero después en las redes sociales nos dimos cuenta que le gustaba a la gente y nos quedamos así", dijo Cristóbal.
Para el verano, la pareja espera atender en horario continuado para que clientes de otras ciudades puedan conocer su emprendimiento. "Por ahora sólo atendemos de lunes a sábado, pero en el verano esperamos atender en horario continuado de lunes a lunes para que personas que vivan lejos y estén de vacaciones puedan venirnos a conocer junto a sus mascotas. Esperamos que les guste y los pedidos aumenten, ya que aunque es una pastelería canina también tenemos alimentos especiales para los gatos", declaró Cristóbal.
De hecho, "Bizcocho" se ha transformado en la mascota oficial de la tienda. "Lo encontramos abandonado y lo adoptamos. Se quedó con nosotros para siempre y él es nuestro representante oficial", dijo Rina del gatito que es con rayas grises. J