Lo de David Pizarro y su tortuosa recuperación (tras lesionarse sólo, sobrexigiéndose en Mantagua, lanzando tiros libres), ya se asemeja un poco al popular "cuento del lobo".

Y es que por una u otra razón o circunstancia, el talentoso volante porteño no ha podido volver a vestir de corto, situación que tiene a los hinchas caturros -y también, al propio ex jugador de la Roma y la Fiorentina, entre otros- con los nervios de punta, pensando en su tan ansiado retorno a las canchas, vistiendo la casaquilla verde de su querido Wanderers.

Tras largos 70 días sin jugar -su último partido oficial fue por Chile ante su similar de Perú, en la semifinal de la Copa América (el lunes 29 de junio pasado)- todo indica que el próximo sábado en el Municipal de La Cisterna y jugando como visita ante Palestino, el "Fantasista" debería volver a vestir de verde. De hecho, el alta médica ya está en su poder e incluso pudo haber sumado minutos -por la Roja de Sampaoli- en el amistoso del sábado frente a Paraguay, pero desde el cuerpo técnico y médico de la Selección Chilena, prefirieron "no exponerlo" en ya, su última etapa de recuperación tras el desgarro miofascial de un centímetro que le afectó su cuádriceps derecho.

SEMANA CLAVE

Es quizás por ello, que lo que haga Pizarro -y cómo se sienta en esta semana- va a resultar clave, ya pensando en que el playanchino ya se perdió el comienzo del Torneo de Apertura y que tampoco pudo estar en los partidos que por Copa Sudamericana, el plantel caturro enfrentó a los paraguayos de Libertad.

El mediocampista, que ha manifestado su intención de jugar de tres cuartos de cancha hacia arriba, tendrá que conversar esta semana con el técnico Emiliano Astorga, para dar con el puesto y la función adecuada del seleccionado chileno, todo en beneficio de la institución porteña. J