Un doloroso proceso de recuperación vive la madre porteña que sufrió graves quemaduras en una cesárea.
El 19 de marzo Eugenia Ruiz Fuenzalida, madre de tres hijos de 17, 13 y 5 años, dio a luz a su cuarto retoño. Por recomendación de su ginecólogo lo hizo en el hospital San Martín de Quillota en una operación. En el procedimiento con un electrobisturí se produjo una combustión con el líquido esterilizador que le echaron en sus piernas, provocándole cuatro quemaduras graves. Su hija Florencia nació ilesa. Eugenia fue dada de alta prontamente y ella reclamó que el médico responsable no dio una explicación. Su caso incluso fue cubierto por un matinal de TV.
Posteriormente la paciente fue al hospital Dr. Eduardo Pereira de San Roque, donde actualmente está internada. Vía telefónica señaló a La Estrella que en el recinto primero le hicieron un completo aseo quirúrgico por la infección en sus extremidades inferiores. Luego estuvo en su domicilio, pero se internó nuevamente para dos intervenciones de injertos de piel, extraídas de la parte sana de sus piernas. El proceso ha sido muy doloroso al punto que le aplican morfina. Hoy era evaluada y si no quedan bien los injertos sería operada nuevamente. Su hija Florencia es cuidada y alimentada por la abuela, ya que por los remedios aún no puede amamantarla. Eugenia la ve a ratos en el hospital. La afectada señaló que recibió sólo un llamado telefónico del director del hospital de Quillota, que no se apersonó a verla. Ya tiene asesoría de un abogado para la demanda contra quienes resulten responsables de su estado. J