Recuperando históricos espacios porteños
Mucho se ha hablado de recuperar los espacios que tienen historia. Este es el caso de la ex capilla Santa Ana, inmueble de gran valor patrimonial ubicado en el cerro Cordillera. Esta edificación albergó a la primera población obrera de Valparaíso, cuyos residentes son descendientes directos de los primeros moradores. Hoy la ex-capilla, y debido a las malas condiciones de su estado estructural se encuentra en camino a la restauración, gracias al apoyo que un grupo de jóvenes y vecinos que se han entregado en apoyo a la capilla.
La idea de este grupo es poder recuperar temas que son significativos para el sector aledaño a este lugar, y así rescatar la memoria de sectores populares que tanto significado tienen para los vecinos del cerro Cordillera.
Tras este objetivo y después del derrumbre de un muro ocurrido en la capilla el año 2013 por la humedad producida por las lluvias, afectó seriamente la edificación. Fue así, y de manera rápida, la agrupación en conjunto con vecinos iniciaron un proyecto para fortalecer la edificación la cual, por intermedio de el Fondo de Patrimonio, se logró ganar el proyecto y así comenzar la restauración que un ese comienzo era un sueño.
Finalmente la ambición de ver que la restauración de la capilla era sólo el comienzo de el deseo por recuperar el antiguo patrimonio, durante el año 2014 volvieron a postular, esta vez a través Fondo de Patrimonio del CNCA, donde luego de una larga espera y tras 17 iniciativas más presentadas, fueron éste uno de los escogidos para continuar la restauración, ahora bajo el nombre de "Consolidación Estructural de la capilla Santa Ana", el cual cuenta con un presupuesto de 200 millones de pesos obtenidos por el cofinanciamiento entre el Consejo de la Cultura y las Artes y el Centro Cívico ex- capilla Santa Ana.
"Luego del derrumbe pensamos que era necesario comenzar a fortificarla, fue así como iniciamos este proyecto y después de observar nos dimos cuenta que realmente la capilla se encontraba en condiciones graves por lo que con mayor razón decidimos preocuparnos de esta edificación", declaró Andalucía Corvalán, psicológa y encargada de comunicaciones de la agrupación Santa Ana.
La psicológa aseguró que la palabra restauración aún es un poco grande, ya que el fondo que ellos obtuvieron es primero para fotalecer la iglesia.
"No nos alcanza para restauración todavía, por ahora estamos impidiendo que la estructura no de derrumbe y que no hayan accidentes graves, nada más", enfatizó Andalucía Corvalán.
EL COMIENZO
La psicológa comentó que todo partió con un grupo de jóvenes que comenzó a trabajar en la población obrera de la unión, sector aledaño a esta capilla. Tras las ganas de los vecinos por seguir arreglando esta emblemática zona fijaron finalmente los ojos en esta capilla abandonada.
"La capilla se encontraba abandonada desde el 60 más o menos, entonces como ellos ya habían desarrollado este proyecto que fue de gran envergadura, obviamente dijieron 'aquí hay que seguir; y en ese aquí hay que seguir empezaron a conversar con el refugio de cristo que ellos son los dueños de esta capilla y del hogar María Goretti y en ese conversar se llegó a un acuerdo de fortificarla y en un futuro restaurarla", señaló Andalucía Corvalán.
La psicológa agregó además que esta capilla se está restaurando en conjunto con vecinos del sector y que se encuentra dentro de una zona patrimonial a pesar de no estar certificada ante la ley como tal.´Apesar de aquello la construcción tampoco puede ser derrumbada, debido al gran valor de la edificación y su hitoria, para esto Andalucía Corvalán señaló que pronto esperan obtener el certificado.
HISTORIA
Los orígenes de la Capilla Santa Ana se remontan a la década de 1870. Ya en 1881 la emblemática edificación terminó su construcción para así dar paso a lo que en ese entonces era una capilla;fue de esta manera como surge una de las primeras capillas en los cerro de Valparaíso y desde sus inicios hasta la década del 60 cumple un rol evangelizador. Con el tiempo fueron disminuyendo las actividades desarrolladas en ella hasta quedar abandonada por décadas.
Bajo este contexto, en el año 2008 un grupo de vecinos del cerro Cordillera y lugares aledaños decide recuperar este inmueble con el fin de convertirlo en una espacio para los habitantes del cerro y el resto de la comunidad porteña.
Tras la obtención del espacio otorgado por parte del Refugio de Cristo se inician finalmente las gestiones para comenzar el plan de acción a través el cual, se ve relfejada la autogestión del trabajo comunitario del Centro Cívicio Santa Ana y sus organizaciones asociadas.
Tras esto el grupo de jóvenes liderado por Christian Amarales comenzaron la rehabilitación del espacio.
"La mayoría de los que apoyan el proyecto son personas que viven en el sector durante toda su vida o como mínimo hace años. Yo soy nacido y criado acá. Pienso que esto fue una gestión de la misma gente, nosotros nos unimos y ayudamos a que esto fuera posible", añandió
Por otro lado Marcelo Alfaro, miembro de la asamblea del Centro Cívico Santa Ana añadió lo siguiente: "Nos sentimos muy contentos porque más allá del fondo, detrás de nuestro equipo hay un respaldo enorme de muchas personas y organizaciones que han creído en este sueño".
Después del largo proceso, finalmente se pusieron manos a la obra y debido a esta situación la ministra del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, Claudia Barattini, visitó hace muy poco días las dependencias de la iglesia expresando la emoción que le causa esta restauración.