El "Toffee" agradece todo el apoyo por premio de Farkas
Antes de empezar esta entrevista, Claudio Osorio emite una importante aclaración: "Hace como seis meses que no vendo toffees. Están muy caros y ahora vendo Pesetas, pero no me molesta que me digan así". El hombre, que ha sido postulado para ser uno de los 10 trabajadores premiados con los $5 millones que el empresario Leonardo Farkas repartirá a cada obrero el próximo 1 de mayo, está contento por lo que está viviendo.
"Yo nunca pensé que me iba a pasar esto. El viernes fui a la casa a almorzar y mi hermana me contó lo que estaba pasando. No lo podía creer. Ingresé al Facebook y vi que muchas personas estaban hablando de mí. Pero me dio miedo y apagué el computador porque pensé que se podían estar burlando", confiesa mientras toma su Coca Cola y se ubica en una de las mesas de los negocios de la plaza Miraflores.
Nervioso y feliz
El 9 de marzo de 1973, Claudio "Toffee" dice que sintió lo mismo que hoy. "Ese día fue mi primer día de clases y estaba muy nervioso y feliz, igual que en este momento. Entraba al primero básico de la escuela 98 del Retiro, en Quilpué (José Miguel Infante) y aprendí a leer. Después en 1974 mi mamá me cambió al Camilo Henríquez de la calle Lautaro donde me pasaron mucha pero mucha materia. Nunca olvido los pizarrones completamente llenos de contenidos. Sobre todo en Ciencias Naturales que nos enseñaban de las enfermedades como la tuberculosis, la historia de las vacunas, del medio ambiente y las partes fundamentales de los vegetales", relata dejando la bebida a un lado y las Pesetas en una silla.
Claudio Osorio se ríe todo el tiempo y pese a que le cuesta hablar, se da a entender a su manera. "Siempre fui humanista y me gustaban los ramos de Castellano, hoy Lenguaje y Comunicación, como también Ciencias Sociales, Ciencias Naturales que era donde yo arrasaba. Matemáticas no me gustaba porque me bajaba el promedio. Así que por eso siempre tuve de promedio general entre un 5,6 y 5,9", apunta entre risas.
El "Toffee", como lo han apodado de cariño, después sacó su enseñanza media en el liceo A-38 de Villa Alemana y se transformó en un adulto. "De nacimiento sufrí de parálisis cerebral espástica que sólo me afecta la parte motora y no la intelectual como mucha gente piensa o cree. Por eso siempre quise estudiar y ahora trabajar, porque uno tiene que esforzarse. Mi primer trabajo fue el verano de 1978 en un balneario de Retiro, en donde me dedicaba a recoger papeles y botellas", sostiene un poco más serio.
Su trabajo
Pero cuando terminó el verano, Claudio, que ha vivido gran parte de su vida en Quilpué, se quedó sin pega. "Me puse a pensar qué podía hacer porque no quería dar problemas y se me ocurrió que podía vender dulces en las micros. Y ahí llegaron a mi vida los toffees, jajajá, y me puse a vender. Ya van 30 años de eso y bueno, seis meses con las Pesetas porque subieron los dulces", afirma.
El comerciante se considera una persona alegre y perseverante. Y que le gusta juntarse con sus amigos. "Tengo un grupo de amigos con los que me junto unas cuatro veces en el año en Quilpué. La última fue en febrero en la casa de una amiga y lo pasamos muy bien cantando karaoke, jajajá. Los quiero mucho porque tenemos lindos recuerdos", manifiesta emocionado.
La gente que pasa por el lado del "Toffee" lo mira con ternura. Claudio les sonríe y sigue contando sobre su vida. "Además de juntarme con mis amigos, me gusta mucho la música. En un momento llegué a tener 700 cassettes de música anglo, porque esa es la que más me gusta. También intenté tocar batería y aunque llevaba bien el ritmo, nunca se me dio la posibilidad de aprender profesionalmente. Me hubiera gustado aprender a tocar el violín o el piano, que son otros instrumentos que me gustan. Y el deporte... eh... me gusta el tenis pero nunca he podido jugar", señala.
Total Apoyo
El grupo Facebook "Nominamos a Claudio "Toffee" #farkasdiadeltrabajador" ha seguido creciendo, al punto de sumar casi 17 mil seguidores. Claudio sabe de su existencia y agradece el apoyo, que también ha llegado de chilenos que viven en el extranjero y lo conocieron en su niñez. "Le doy gracias a la gente que valora lo que hago honradamente. Soy una persona que cree en Dios y que el 5 de abril de 1986 decidió ser cristiano. Eso fue muy especial para mí como esto de ahora, en que la gente quiere que me gane la plata que dará el señor Farkas", declara alegre.
- Pagar algunas deudas que tengo como todos los chilenos y ahorrar. Sería una gran ayuda para mí.
Los que deseen postular a Claudio para el premio que está ofreciendo Farkas, sólo deben ubicar las redes sociales del filántropo y escribirle sobre "Toffee" con el hashtag #FARKASDIADEL TRABAJADOR (en mayúsculas). El empresario dará a conocer hoy lunes a las 09.00 horas uno de los primeros trabajadores que premiará. J