Una historia confusa y un relato algo contradictorio, sumado a sus antecedentes penales, terminaron por jugarle en contra a un ingeniero agrónomo que la tarde del jueves fue detenido por Carabineros de la Tenencia Nueva Aurora por portar un revólver y 5 cartuchos calibre 32 sin percutar además de un cortaplumas Victorinox.
El hecho ocurrió cerca de las 17 horas del cuando G.C.R. transitaba a bordo de su moto por el sector de Nueva Aurora y al advertir la presencia de carabineros habría abandonado su móvil y su casco, para huir hacia unos matorrales.
Al ser fiscalizado, los uniformados encontraron entre sus ropas el revólver, y 5 cartuchos calibre 32, todo dentro de su funda. Asimismo, el motorista llevaba consigo un cortaplumas marca Victorinox.
Durante la audiencia de control y su formalización por el delito de porte ilegal de arma de fuego, el ingeniero y estudiante de leyes renunció a su derecho de guardar silencio y decidió pasar a estrado para relatar ante el tribunal su versión de lo ocurrido.
Según relató, el pasado 29 de enero falleció su madre situación que habría gatillado una severa depresión en su anciano padre.
'Tenían entre ellos un pacto: el primero que muriera el otro lo seguía. Y resulta que mi padre tenía el 32 que era de mi madre y yo lo saqué del velador. Hace tiempo que tenía la intención de hacerlo, se lo había comentado a la nana de llevarlo a Carabineros', precisó G.C.R. añadiendo que al momento de su detención se encontraba a dos cuadras de la comisaría.
El imputado precisó que se acercó a los matorrales para hacer sus necesidades biológicas y no escapando de carabineros.
Al ser consultado por el magistrado Roberto Pinto por qué portaba además un cuchillo, el imputado explicó que siempre lo llevabaportaba desde el 2007 'porque tengo un campo'.
Las explicaciones sumadas a sus antecedentes penales -porte ilegal de arma de fuego e infracción a la ley de drogas - no resultaron convincentes y se decretó su prisión preventiva durante los 70 días de investigación. J