El renacer de Rudy Rey
El pasado 1 de enero, la página de Facebook de Rudy Núñez, conocido en el mundo del humor como Rudy Rey, se actualizó con una imagen que incluía un significativo mensaje. "¿Te reíste mucho cuando caí? Pues te regalo un billete en primera fila para que veas cómo me levanto", dice la publicación, que explica en parte la nueva etapa que inició el comediante en este nuevo año.
Para Rudy Rey, el 2014 fue, en sus palabras, un año muy complicado. Y es que además de su fracasado debut en el Festival de Viña del Mar -con una rutina que alcanzó a presentar por sólo 18 minutos y bajo sonoras pifias-, el artista porteño sufrió con el incendio que afectó al puerto en abril, y que dejó damnificados a algunos de sus amigos y familiares.
"Puras tragedias, pero ahora lo veo como parte de un crecimiento. Creo que las cosas suceden por algo más poderoso, más grande", dijo Núñez, que comenzó el 2015 con el estreno de "Loco por Viña": un nuevo espectáculo en vivo que marca su regreso oficial a los escenarios, y en el que repasa, en clave de humor, todos los fantasmas que lo han perseguido en el último tiempo.
COBERTURA MEDIÁTICA
"Ahora que comienza toda la locura por el Festival, hice esta rutina, para aprovechar la cobertura mediática. Voy a sacarle provecho, tal como ellos sacaron provecho de mí", explicó el humorista, que ya inició una gira por la Quinta Región con su nuevo show. Según él, hasta ahora la respuesta ha sido positiva.
"La gente ha sido muy buena onda, me piden la Gaviota al final del show, me agarran 'pal hueveo'. No te puedo negar que al principio me cuestioné muchas cosas, porque fue un porrazo grande y me costó tomar la valentía de subirme de nuevo y con las mismas ganas a un escenario".
RISOTERAPIA
-Aprendí muchísimo. Primero me fui a trabajar a Bolivia, en una especie de retiro espiritual. En el año me puse a estudiar todo lo que tiene que ver el humor y las emociones, empecé a hacer risoterapia y charlas motivacionales, y eso me ayudó mucho a reinventarme, a mantener la tranquilidad arriba del escenario.
-Yo antes, en el "Mentiras verdaderas" (La Red) por ejemplo, contaba chistes. Pero en Viña me hicieron hacer humor musical y no me dejaron contar chistes. Ahora hago una mezcla de stand up comedy con las parodias musicales y chistes, entonces el montaje es mucho más nutrido.
-Toda la responsabilidad es mía, porque me embobé con la situación. Mostré una rutina ultra vista pero mis asesores me decían que estaba bien. En todo caso, creo que faltó apoyo de la producción.
Por ejemplo, yo quería actuar con la orquesta del Festival, mi idea era subirme con el director, pero me dijeron que no, que la ficha técnica de Ana Gabriel era muy extensa. Al final los mismos productores me ordenaron la rutina. Y Álex Hernández (director del Festival) me tiró a los tres minutos, no me dio tiempo al comienzo, me tiraron siete minutos de pura música.
-Yo tenía un mánager, pasó lo de Viña y al otro día se despidió de mí y no lo vi nunca más. No me llamó nunca nadie de la producción ni del Festival, quedé más solo que un dedo. Pero no me lo tomo en mala, lo veo como una lección.
- Es que esto mermó toda mi carrera. Como que me congelaron. Después de "Coliseo romano" y "Hazme reír" yo estaba en "Juga2" y en "Mentiras verdaderas", pero no me llamaron más. Aparte, antes de Viña repitieron mis rutinas en CHV y en Mega, y eso me perjudicó.
-Yo me quería sacar los balazos al tiro, de hecho, estaba listo en Viva Dichato pero se cayó. Ahora pienso que en un par de años me gustaría volver a Viña. ¿Por que no? Sería bonito. J