Mantener una campaña relativamente pareja jugando tanto de local como de visita, es lo que le ha faltado a Everton para estar en la parte alta de la tabla de posiciones.

Su 85.7 % de rendimiento como local, no se condice con el magro 20.8% que ostentan los viñamarinos jugando fuera de casa, con sendas derrotas ante La Serena, Coquimbo, San Felipe, San Luis y ahora Curicó.

Al respecto, el técnico Carlos Medina reconoció aquella falencia, indicando que "hemos trabajado las cosas que se hicieron mal la semana pasada y nos quedan cuatro partidos muy importantes para poder sumar y quedar cerca de los punteros, partiendo por Magallanes el domingo. El equipo quiere remontar, tenemos una deuda jugando como visita, en donde nos ha costado mucho. Hicimos un análisis respecto a lo que sucedió en Curicó y a lo mejor caímos en el error de no plantear el partido de la misma forma en que lo veníamos haciendo como local. Al equipo le faltó actitud y esa es la autocrítica que nosotros como cuerpo técnico hemos realizado".

En relación al mismo tema, el central Juan Grabowski agregó que "tras un resultado inesperado como el del fin de semana último, no tenemos más que levantarnos y ganar. Nos toca un rival complicado como Magallanes, pero para llegar arriba hay que sumar. Nuestra campaña de local es buena, no así la de visitante y habrá que mejorar ciertos detalles para ser más parejos". J