Por años el entorno del Mercado El Cardonal ha sido un dolor de cabeza para la ciudad patrimonial. Suciedad, malos olores y un desorden vial por el comercio informal, son situaciones que llegarían a su fin, tras un decreto edilicio que sin duda traerá más de una polémica.

La comunidad del edificio del mercado El Cardonal consiguió en forma exclusiva con el municipio, por los próximos cinco años y en carácter de renovable, un permiso de ocupación de las aceras colindantes al perímetro del recinto, conformado por las avenidas: Brasil y Uruguay, y las calles Yungay y Rawson. En la práctica, no se permitirá que comerciantes ambulantes se instalen con sus productos en la acera. Sólo los locatarios podrán exhibir frutas y verduras hasta un metro de distancia desde el frente de cada local del edifico, sin afectar la circulación peatonal. La comunidad del mercado estará obligada, bajo su costo, a instalar baldosas antideslizantes, luminarias, toldos y mobiliario urbano acorde con la arquitectura del inmueble.

conflicto

Díaz sabe que la iniciativa implica un conflicto. "Esperamos que no haya una batalla campal, que sea todo con educación. Es difícil porque ellos se sienten con derechos que no son suyos, pero se acabó la fiesta y la competencia desleal. El gran problema no son tanto los ambulantes, sino los camiones que se jactan de vender más de mil bultos a la semana en la avenida Uruguay; llegan, ensucian y se van sin que nadie les cobre nada", afirmó.

AMBULANTES