Seguidilla de bombas de ruido alteran nervios de viñamarinos
juan jordan c.
Preocupación existe en Viña del Mar por una seguidilla de bombas de ruido. La última se produjo a alrededor de las 17.20 horas de ayer en el centro comercial Open Plaza de Gómez Carreño, muy cerca de la rotonda Santa Julia, en Vila del Mar. Según testigos, esta segunda explosión se produjo en el baño de hombres que colinda con el patio de comidas de dicho centro comercial, situación que habría dejado a dos personas con trauma acústico, siendo derivados al Hospital Gustavo Fricke.
Personal especializado afirmó que esta bomba fue confeccionada con papel aluminio y ácido muriático en una botella de plástico.
En tanto, aún adormilada y también asustada se encontraba ayer Edith Mardones Gamboa, la trabajadora de aseo de 43 años que recibió la peor parte luego que, la noche del martes, detonara un artefacto de ruido al interior del carro de la basura que transportaba en las afueras del hipermercado Tottus de Gómez Carreño, en Viña del Mar.
Pocos minutos antes de que su empleador le aconsejara no hablar con los medios de comunicación, la trabajadora relató las circunstancias en que se produjo el trauma acústico que le dejó como secuela la explosión de la bomba de ruido.
'Fue como a las 8.20 de la tarde (martes), estábamos en la zona de estacionamientos junto a una compañera sacando la basura. Sacamos unos envoltorios de un carro de supermercado, eran de la marca Doggi, los extraimos y los echamos a un tarro, alcanzamos a caminar como dos pasos y explotó la bomba dentro del tarro. Yo lo llevaba así que me explotó. No tengo heridas sólo una inflamación dentro del oído', precisó la trabajadora, madre de dos hijas y abuela de una nieta.
Su compañera, Verónica Cerezo sólo manifestó un cuadro de histeria, debido a la situación vivida, por lo que también fue derivada a la posta.
Ayer, el intendente tuvo la intención de reunirse con la más afectada por la bomba, pero la mujer le manifestó su deseo de no hablar públicamente por orden de su empresa, situación que fue respetada por la autoridad quien incluso llegó hasta su domicilio para visitarla.
Luego de los incidentes relacionados con artefactos explosivos, el intendente regional Ricardo Bravo dispuso una completa revisión de los planes de seguridad del Metro Valparaíso y de los centros comerciales de la zona por parte de Carabineros.
Los incidentes producidos tras la explosión de una bomba en el subcentro de la Estación Escuela Militar en Santiago que dejó a 14 personas heridas el lunes recién pasado, generaron un ambiente de inseguridad, el que ha intentado ser aplacado por las autoridades mediante llamados a la tranquilidad y acciones concretas que apunten a mejorar la fiscalización de los planes de seguridad en espacios públicos y también privados.
Si bien a través de las redes sociales se ha criticado la reacción que se ha tenido tras lo ocurrido en la Región Metropolitana, en general la comunidad ha tomado positivamente los anuncios de reforzamiento de las medidas de seguridad en el metro y en los centros comerciales.
'Me parece bien, excelente, todo lo que sea seguridad es bienvenido', señaló Ismael Maturana.
'Está bien que se haga todo esto, hay tanto delincuente, y se lo digo yo que trabajo en la calle', afirmó Marcelo a la salida de la estación Hospital donde las autoridades encabezadas por el intendente anunciaron la revisión de los planes de seguridad.
En la oportunidad, el intendente Ricardo Bravo anunció la presentación de querellas por las bombas de ruido y desestimó que exista una sobrerreacción de las autoridades frente a los episodios acaecidos.
'Ante una situación como ésta lo que corresponde a la autoridad es entregar el mensaje de tranquilidad a la población que se está haciendo todo lo que está a nuestro alcance para poder hacer que la vida cotidiana de las personas sea en el margen de seguridad y tranquilidad habituales', precisó Bravo.
La autoridad añadió que 'la situación de conmoción no se produce producto de la acción de una autoridad sino que a partir de una acción de personas irresponsables y malintencionadas que han hecho una serie de llamados telefónicos e instalación de explosivos'. J